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De todas las operaciones realizadas, 27 son cesiones y el club percibió 33,4 millones, incluidos los ingresos por préstamos y la amortización de Bamba
30 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Más salidas que fichajes, eso dice la estadística del mercado de invierno del Celta desde su regreso a Primera, en el año 2012. En este tiempo, en 13 ventanas del mes de enero, el conjunto vigués le ha dado salida a 39 jugadores, Joseph Aidoo incluido, y por el contrario han llegado a Vigo 27 futbolistas, el último, Jones El-Abdellaoui, cuyo destino temporal es el Fortuna.
La inmensa mayoría de las salidas fueron mediante la fórmula de la cesión, en concreto 27, pero de los seis que dejaron dinero en caja, uno lo hizo con una cifra casi de récord: Stanislav Lobotka cuando fue traspasado al Nápoles por 23 millones en el 2020. Augusto Fernández, con su salida al Atlético de Madrid en el 2016, supuso un ingreso de cuatro millones de euros. En total, el club celeste ingresó en invierno 33,4 millones. Además, se fueron seis jugadores libres y con dos se aplicó la fórmula de devolución: Júnior Alonso y Lucas Olaza. En estos trece años, solo en enero del 2015 no salió ningún jugador.
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De la mano de Marco Garcés, esta temporada han sido cuatro jugadores en el mercado invernal, tres de ellos hacia la MLS. Sin embargo, los cuatro no son récord ni tampoco se hizo la primera operación con la liga profesional americana en estas fechas. El récord hasta la fecha lo ostentan las campañas 13/14, 17/18 y 18/19 cuando abandonaron el Celta cinco jugadores. En la primera de las fechas, que era la segunda temporada del equipo en la élite y Luis Enrique estaba a las mandos, hubo cinco cesiones: David Rodríguez, al Brigthon; Samuel Llorca, al Alavés; Jonathan Vila, al Beitar de Jerusalén, y Toni Dovale, al Kansas, el primer negocio del Celta con un equipo profesional americano.
En el invierno del 2018, quienes hicieron las maletas fueron John Guidetti, rumbo al Alavés mediante un préstamo que luego se convirtió en venta por valor de 4 millones; Théo Bongonda, que volvió a casa al Zulte belga, y Andrew Hjulsager, Álvaro Lemos e Iván Villar acabaron cedidos en Granada, Lugo y Levante respectivamente. De todos, solo volvió para permanecer en Vigo el portero de Aldán, aunque todavía le quedaba una vuelta más por el Leganés.
Un año después, en enero de 2019, hubo cuatro cesiones sin regreso: Facundo Roncaglia, al Valencia; Dennis Eckert, al Excelsior; Toro Fernández, al Peñarol y Robert Mazan al Venezia. También salió Júnior Alonso, p araguayo que estaba cedido por el Lille. El Celta rompió el préstamo y el lateral se marchó de nuevo al fútbol sudamericano, al Boca Juniors.
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Lobokta, el 69 % de las ventas
En el aspecto económico, el mercado invernal más productivo de la historia celeste se dio en el 2020, justo antes de la pandemia, cuando el equipo vigués traspaso al eslovaco Stanislav Lobotka al Nápones de la Serie A cambio de 23 millones, cantidad que significa el 68,8 % de las ventas del Celta en esta ventana. El segundo ingreso más importante del conjunto celeste a estas alturas de temporada lo dejó en caja Augusto Fernández, cuando decidió aceptar la invitación del Atlético para irse en enero. El argentino fue vendido por cuatro millones.
En teoría, Jonathan Bamba, traspasado la semana pasada al Chicago Fire, es el tercero en el escalafón de ventas, ya que el francés descontó 3,5 millones en materia de amortización de ficha, ya que había llegado al Celta como agente libre. José Naranjo, que solo estuvo media temporada fue vendido al Genk belga por 1,8. Emre Mor y Denis Suárez fueron las dos cesiones con ingresos a cambio, unos 600.000 entre los dos.
Por otra parte, de los 27 jugadores que salieron cedidos a los largo de estos casi tres lustros, el único que volvió para quedarse fue Iván Villar. Todos los demás fueron desapareciendo del mapa celeste.