ALFONSO LÓPEZ, MARINERO DE FISTERRA
22 mar 2002 . Actualizado a las 06:00 h.«Manoliño, que nos están bombardeando». Alfonso López, nacido en Fisterra hace 66 años, apenas recuerda nada de lo que ocurrió después de pronunciar esa frase en un nefasto día de 1982 en las gélidas aguas del Atlántico Sur. López, marino mercante, trabajaba en un barco de transporte de la Armada argentina, hundido por los británicos cuando intentaba aprovisonar a las tropas que habían invadido las Malvinas. Fue una de las víctimas gallegas del conflicto. «Esa guerra fue una cosa insólita, llevada por esos locos de los militares, en una época muy conflictiva», recordaba ayer desde Buenos Aires su mujer, Beatriz Lobelos, argentina pero hija de gallegos de Fisterra. Alfonso se acababa de marchar a pasar unos días a Mar del Plata: «Ahora está jubilado y no navega, pero el mar le sigue tirando mucho. De hecho, después del naufragio siguió navegando». Alfonso López fue uno de los dos únicos supervivientes del hundimiento del buque de transporte. Su paisano de Fisterra Manuel Olveira es un héroe nacional argentino, según un decreto gubernamental de 1998 para reconocer a los hombres muertos en la Guerra de las Malvinas. Manoliño Olveira se hundió con el barco, pero Alfonso logró meterse en un bote con otros dos compañeros. «Uno de ellos cayó al mar y murió congelado. Al final sólo se salvaron Alfonso y otro marinero», relata Beatriz. Alfonso Pérez emigró a Buenos Aires en 1952 y, al igual que otros vecinos de Fisterra, se enroló en la Marina Mercante.