Uruguay rompe con Cuba tras sentirse agraviado por unas palabras de Castro

ALBERTO PEPE LEIRA MONTEVIDEO

INTERNACIONAL

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El líder cubano tachó de «lacayo de Estados Unidos» al presidente Jorge Batlle Uruguay decidió romper sus relaciones con Cuba por las reacciones poco ortodoxas de La Habana después de que Montevideo impulsara una declaración en la ONU que pide «esfuerzos» a Fidel Castro para mejorar los derechos humanos. El primero en abrir fuego contra el presidente de Uruguay, Jorge Batlle, fue el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, después el ministro de Defensa, Raúl Castro, y, finalmente, fue Fidel Castro, que tachó a su homólogo uruguayo de «lacayo de Estados Unidos»

24 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

El día 7, el canciller cubano acusó de «serviles a los intereses de EE UU» a Argentina, Costa Rica y Uruguay. Luego, el ministro de Defensa, Raúl Castro, tras aprobarse la declaración de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, dijo que «fue a Uruguay al que le tocó la tarea de lamer las botas del imperio». Finalmente, el lunes, Fidel Castro, detonó la situación en una rueda de prensa cuando, mientras atacaba al presidente mexicano, Vicente Fox, se refirió en duros términos al mandatario uruguayo, Jorge Batlle, y a su Gobierno. Ante esta situación, Batlle decidió romper relaciones con Cuba porque «el tono de los agravios ha subido». La ruptura será «hasta que se advierta por parte de quien corresponda que Uruguay quiere que al pueblo cubano se le franquee lo que hoy cualquier pueblo democrático tiene y que notoriamente allí no existe: libertad». De esta forma, Uruguay y Cuba interrumpen 16 años de relaciones, tras un paréntesis de dos décadas, y se convierte en el primer país latinoamericano que rompe con La Habana desde hace casi 40 años.