España descarta adiestrar a los nuevos policías y militares de Irak
INTERNACIONAL
Niega que Madrid siga «miméticamente» a París y Berlín, sino que «defiende sus intereses» Estudia aportar unos 300 soldados a la misión de la OTAN en Afganistán , al igual que Francia
29 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.El ministro Miguel Ángel Moratinos aseguró ayer que España seguirá apoyando al Gobierno iraquí, pero señaló que no participará en el adiestramiento de las fuerzas de seguridad o militares de ese país. En rueda de prensa, el ministro de Exteriores español aseveró que, según lo acordado el lunes, los países miembros tenían autonomía para decidir si formaban o no a las fuerzas de Irak porque la OTAN los «invita» a ello con un llamamiento a la «voluntad» de cada uno. Sin embargo, fuentes estadounidenses interpretan el acuerdo como un paso para que la OTAN abra la puerta a una futura implicación directa en el proceso de estabilización de Irak. Pero el presidente francés, Jacques Chirac, volvió ayer a rechazar esa posibilidad al afirmar que «no abre la puerta para nada». «No se trata de una presencia de fuerzas de la OTAN en Irak, a la que por mi parte soy totalmente hostil», declaró. Para evitar suspicacias, Moratinos precisó que España se alinea en este asunto como en otros de política exterior con sus propios intereses, que pueden coincidir o no, según los casos, con los de Francia, Alemania, EE.UU u otros. «Lo que hace España no es alinearse miméticamente y hacer seguidismo, lo que hacemos es analizar los objetivos y cómo se pueden defender de mejor manera», dijo a la prensa. Además, reveló que él y su colega de Defensa, José Bono, mantuvieron una «breve reunión» con sus homólogos de EE.UU., Colin Powell y Donald Rumsfeld, en los que abordaron la situación de Afganistán, Irak y Oriente Próximo. El jefe de la diplomacia española transmitió un mensaje de «normalidad» sobre las relaciones entre ambos países. Sobre Afganistán, el titular español de Exteriores manifestó de nuevo «la buena disponibilidad» del Gobierno a aumentar la presencia militar, antes de reunirse con el presidente Hamid Karzai. Mientras Francia y España podrían aportar unos 300 soldados cada uno, el canciller Gerhard Schröder dejó claro que no puede «ir más lejos» porque es el país que más tropas tiene en Afganistán, más de 1.800 soldados.