Dimite el número dos de Rice, decepcionado por no haber sido designado secretario del Tesoro

P. Parameswaran WASHINGTON

INTERNACIONAL

19 jun 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

El número dos de la diplomacia estadounidense, Robert Zoellick, de 52 años, renunció ayer y declaró que comenzará a trabajar en el banco de inversiones Goldman Sachs. «Es el momento de dejar el cargo», declaró Zoellick en una conferencia de prensa conjunta con la secretaria de Estado, Condoleezza Rice. «He cumplido con las metas que me había puesto, y ahora es momento de dar un paso al costado», agregó. Según algunos medios estadounidenses, Zoellick -abogado licenciado en Harvard- se decepcionó por no haber sido designado para el puesto de secretario del Tesoro en los últimos nombramientos anunciados por el presidente George W. Bush en mayo. Bush designó a Henry Paulson para sustituir a John Snow en ese puesto. «Es con gran pesar que anuncio que Bob Zoellick dejará el departamento [de Estado] en las próximas semanas», declaró Rice. Zoellick era mucho más que su suplente. «Fue uno de mis consejeros más cercanos y valiosos en todas las cuestiones internacionales sin excepción», agregó, sin precisar quién lo sucederá. Zoellick consagró gran parte de su tiempo como subsecretario de Estado a las relaciones con China para intentar que fuera «miembro a tiempo completo» del mundo de los negocios, al tiempo de presionarla para que revaluara su moneda. «Estoy complacido, en particular, de haber ayudado en el acercamiento de EE.UU. con China, porque esa relación será vital para Estados Unidos y para el mundo», dijo Zoellick en su carta de renuncia. Su otra preocupación fue Sudán. Participó activamente en las conversaciones de paz entre el Gobierno y los rebeldes.