Blair afronta hoy municipales con regusto a «día del juicio»

Imanol Allende CORRESPONSAL | LONDRES

INTERNACIONAL

Los sondeos prevén un castigo a la política del líder laborista También se celebran comicios a la Asamblea de Gales y al Parlamento de Escocia

02 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Con un Gobierno laborista impopular, un nuevo primer ministro que será anunciado en las próximas semanas, un resurgimiento de un Partido Conservador y un Partido Nacionalista Escocés flirteando con la toma de poder y la independencia, las elecciones municipales en Inglaterra, a la Asamblea de Gales y al Parlamento de Escocia de hoy toman un interés inusitado y de enorme relieve en la vida política británica. Las elecciones municipales se celebran en la semana en la que el primer ministro británico, Tony Blair, cumple diez años en el poder, una oportunidad que ha sido vista por sus seguidores y detractores dentro y fuera del Partido Laborista como el «día del juicio final», cuando el electorado decantará su veredicto sobre su década como premier . Tras ser el primer ministro en 1997 más joven desde 1812, el apoyo a Blair ha caído de una manera fulminante y progresiva, en especial por su posicionamiento intransigente a favor de la intervención militar norteamericana en Irak, y el escándalo sobre la entrega de títulos nobiliarios a cambio de donaciones al partido. En estas elecciones están en juego 10.000 cargos municipales en Inglaterra, y los órganos de representación de Escocia y Gales. Pero muchos políticos de formaciones menores se quejan de que el electorado inglés, sobre todo, vote en esta ocasión más con el corazón que con la cabeza, esto es, con ánimos de sancionar o aprobar la política blairista , mostrando una peligrosa indiferencia por los problemas de sus municipios. Sondeos El mes pasado, los sondeos arrojaban un porcentaje de voto para el laborismo de un 27% (el menor desde 1983), frente a un 36% de los conservadores, un renacimiento propiciado por el cambio de imagen que ha llevado su líder, David Cameron, a la formación tory . El anuncio realizado por Blair el martes de que en unos días, posiblemente el miércoles o eljueves, se sabrá la fecha de su salida del Gobierno y el inicio del proceso de nominación de Gordon Brown para sustituirlo, no parece haber animado a los 32,8 millones de ingleses con derecho de voto. Así, los laboristas se preparan para el batacazo, ya que se espera que pierdan cientos de ediles en los 312 municipios ingleses. Ya en las elecciones del 2003 los laboristas salieron mal parados. En Gales se espera que los resultados arrojen una Asamblea dirigida por una coalición. Los últimos sondeos colocan a los laboristas con 25 escaños, Plaid Cymru (nacionalistas) con 15, a los conservadores con 10, y a los liberales demócratas con ocho. Por tanto, los laboristas, sin mayoría, deberán de coaligarse con liberales o con nacionalistas para gobernar.