Fujimori no pide perdón por los asesinatos, pero se disculpa ante las familias de las víctimas
INTERNACIONAL
El ex presidente reiteró que nunca dio órdenes para que se cometieran esos crímenes.
21 dic 2007 . Actualizado a las 22:34 h.El ex presidente de Perú Alberto Fujimori pidió disculpas a los familiares de las miles personas que fueron asesinadas por las fuerzas de seguridad y por los grupos terroristas durante su Gobierno (1990-2000).
Durante la sexta audiencia del juicio que se le sigue por violaciones a los derechos humanos, Fujimori reconoció que hubo «miles» de daños físicos, morales y sociales mientras estuvo en el poder, aunque declinó pedir perdón a los afectados por estos sucesos.
«No (pido) perdón, pero sí pido disculpas, ahora que estamos en este proceso, a todas estas víctimas, tanto aquellas producidas por las fuerzas del orden como por el MRTA y Sendero (Luminoso)», señaló el ex gobernante.
Al ser interrogado por la abogada de los familiares de las víctimas, Gloria Cano, Fujimori afirmó que le dolió «en el alma» enterarse de esos casos, entre los que mencionó las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, por los que está siendo juzgado.
«A mí, por supuesto, que me dolían todos estos hechos, me dolían los miles y miles de muertos», manifestó antes de reconocer que una investigación de varios años le permitió concluir que en La Cantuta se cometieron violaciones a los derechos humanos.
Fujimori reiteró, sin embargo, que nunca dio órdenes para que se cometieran esos crímenes y señaló que la Ley de Amnistía que benefició a los miembros del grupo paramilitar Colina buscó poner un «sello de la paz en el Perú» y no la impunidad.
El ex presidente subrayó que no tenía motivos para ordenar los asesinatos.
La petición de disculpas de Fujimori causó distintas reacciones entre los afectados.
La representante de los familiares de las víctimas de La Cantuta, Gisella Ortíz, la rechazó por considerarla tardía.
Ortíz señaló que Fujimori tuvo 15 años para mostrar su arrepentimiento, por lo que opinó que su alocución de hoy forma parte de su estrategia de defensa legal.
El director de la Asociación Pro Derechos Humanos, Francisco Soberón, comentó, por su parte, que la actitud de Fujimori «es un reconocimiento de un nivel de responsabilidad sobre los crímenes que él dice que no se informó, que se no se enteraba, que no le comunicaban».
Fujimori, extraditado desde Chile por dos casos de violación a los derechos humanos y cinco de corrupción, es juzgado por los casos de Barrios Altos y La Cantuta, donde murieron un total de 25 personas, así como por los secuestros en 1992 del periodista Gustavo Gorriti y el empresario Samuel Dyer.
Durante el interrogatorio de hoy, Fujimori volvió a señalar que no recuerda varios de los sucesos que se le imputan, a pesar de que reconoció que muchos de sus cercanos colaboradores lo recuerdan como una persona con «una memoria prodigiosa».
Esta actitud, que ha sido interpretada por sus acusadores como una estrategia para evadir su eventual responsabilidad, llevó al jefe del Instituto de Medicina Legal del Perú, Luis Bromley, a ofrecerse a someterlo a un examen «neuro-científico».
Bromley dijo que, con el examen, se puede definir «si su olvido es por una lesión psíquica que le impide a Fujimori decodificar la información que tiene en el cerebro o si está mintiendo. Porque, definitivamente, la información la tiene registrada».
El especialista remarcó que la aparente «amnesia transitoria» que afecta a Fujimori «es muy extraña desde el punto de vista médico».