Almirante contra vicepresidente

Ángela Rodicio

INTERNACIONAL

14 mar 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

«Si en las postrimerías de la Administración Bush vamos a la guerra con Irán, se pensará en un hombre. Y si no declaramos la guerra a Irán, también tendremos que llegar al mismo hombre. Es la criatura más rara del universo Bush: el policía bueno en Irán; estratégicamente brillante. Se llama William Fallon, aunque sus amigos lo conocen como Fox (zorro)». Así comienza el artículo sobre el almirante al mando del Comando Central en el último número de la revista Esquire . Que ha provocado la dimisión de Fallon, el Zorro.

Porque Fallon ha mostrado públicamente sus reservas sobre una posible campaña militar contra Irán. Algo en lo que estaría empeñado el auténtico hombre fuerte de la Casa Blanca, el vicepresidente Dick Cheney, que se va de visita a Oriente Medio. Fallon, cuya responsabilidad eran las fuerzas norteamericanas desplegadas desde el este de África a las fronteras con China, pasando por Irak, Irán, Afganistán y Pakistán, ha decidido que es mejor marcharse.

Tras 40 años, Fallon ha mostrado su desacuerdo con lo que algunos ya suponen que es el plan de ataque a Irán. La tercera guerra mundial a la que alude Bush, que compara a Ahmadineyad con Hitler.

En diciembre del 2006, cuando tomó posesión de su cargo, Fallon declaró que durante su mandato «no va a tener lugar una campaña contra Irán». También se le ha oído decir que «hay algunos como yo intentando meter en vereda a todos los locos aventureros por ahí sueltos». La responsabilidad de los militares para evitar otra debacle como la de Irak, cuando se les acusó de no haberla impedido. Fallon se llevaba mal con el general David Petraeus, al que considera un «lameculos». Y difiere de él en que, más que Irak o Irán, ahora EE.?UU. debería concentrarse en Pakistán y Afganistán.

Pero Cheney ha decidido mandar un tercer portaviones al Golfo. El Harry S. Truman , con misiles Tomahawk, e incluso armas nucleares. Y al despliegue en el Cáucaso, al norte de Irán, aves nodriza para que reposten en vuelo los bombarderos B-52, que parten de su base en la isla de Diego García, en el Índico. Una victoria de los radicales en Irán podría agravarlo todo.