Birmania busca la reconstrucción del país, mientras la ONU da prioridad a salvar vidas humanas
INTERNACIONAL
La Junta Militar de Birmania espera recibir de la conferencia internacional de donantes iniciada ayer en Rangún más de 10.000 millones de dólares para la reconstrucción del país, tras el paso del ciclón Nargis, pero la ONU insiste en que la prioridad son los supervivientes. «Tenemos que centrarnos en nuestro objetivo inmediato: salvar vidas», afirmó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, durante la reunión para buscar fondos, organizada por Naciones Unidas y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), de la que forma parte Birmania.
«Nuestro desafío inmediato es humanitario», señaló Ban, que prevé que «las operaciones de socorro durarán al menos seis meses». «Las infraestructuras tienen que ser reconstruidas», pero «no puede ser nuestra preocupación principal», alertó el secretario general de la ONU respecto a las acciones necesarias tras una de las peores catástrofes que asoló al país, dejando al menos 133.600 muertos y desaparecidos, y 2,4 millones de damnificados.
Ban Ki-moon afirmó en la apertura de la conferencia internacional que Birmania había entendido la urgencia de la situación para los más de dos millones de damnificados del ciclón, que arrasó el sur del país el 2 y el 3 de mayo.
De hecho, Ban Ki-moon obtuvo el viernes, tras una excepcional reunión con el número uno birmano, el general Than Shwe, su autorización para dejar entrar en Birmania «a todos los cooperantes internacionales, sea cual sea su nacionalidad». Pero el primer ministro del país, Thein Sein, se mostró ayer prudente y afirmó que está dispuesto a «aceptar a estos grupos humanitarios interesados en la reconstrucción conforme a nuestras prioridades y a la extensión del trabajo que se tiene que realizar».