La Comisión Europea (CE) suspendió ayer la entrega a Bulgaria de algunos fondos europeos por casi 500 millones de euros y retiró el control de fondos a dos agencias estatales búlgaras debido al elevado nivel de corrupción y de irregularidades en ese país, el más pobre de la Unión.
La CE aprobó varios informes sobre la corrupción y la reforma judicial en Rumanía y Bulgaria, y señaló que en este último país la lucha contra la corrupción y el crimen organizado «no produce suficientes resultados y muchos casos quedan impunes».
«La Comisión quiere ayudar a Bulgaria y Rumanía, pero los resultados deben venir de los dos países», señaló el portavoz jefe de la CE, Johannes Laitenberger.
Explicó que las medidas acordadas son temporales y serán levantadas «lo antes posible», una vez que las autoridades búlgaras pongan en práctica una serie de medidas exigidas.