Funcionarios de los servicios de inteligencia de Estados Unidos advirtieron a la India a mediados de octubre de un posible atentado en Bombay, según han informado las cadenas de televisión ABC y CNN. Los avisos, que según esta información habrían sido al menos dos, advertían de que podía producirse un ataque desde el mar y tener como objetivos centros de negocios y hoteles de lujo.
En concreto, se advirtió de la posibilidad de que uno de estos hoteles fuera el Taj Mahal, el mismo que sufrió la ofensiva durante la semana pasada. El dueño de este hotel, el empresario indio Ratán Tata, ha reconocido que la seguridad del recinto se aumentó a raíz de la advertencia estadounidense. Aunque se había relajado en los días anteriores al ataque. Un ataque que, por otra parte, no se hubiera evitado aunque las medidas de seguridad hubieran sido mayores, aseguró Tata.
Después del aviso americano, los servicios secretos indios detectaron el 18 de noviembre una llamada a un teléfono de Pakistán que tienen controlado como perteneciente a un líder del grupo terrorista Lashkar-e-Toiba, que el Gobierno indio cree que está detrás de los recientes atentados en Bombay.
Además, funcionarios de inteligencia estadounidense han explicado que se ha seguido la pista a teléfonos móviles y tarjetas de prepago usadas por los terroristas y recuperadas por la policía de la India.
Las cadenas de televisión han desvelado que esas pistas también llevan hasta Pakistán y pueden desvelar conexiones con Estados Unidos que se están analizando. Según esta información, incluso una de esas tarjetas podría haber sido adquirida en territorio estadounidense.