Los acontecimientos no han podido ser verificados sobre el terreno por la prensa internacional, ya que las autoridades iraníes advirtieron que todos los permisos habían sido cancelados para trabajar en la calle. Sin embargo, los enfrentamientos han sido confirmados por la prensa oficial, para la cual la policía ha tenido que actuar contra grupúsculos que trataban de apropiarse de las celebraciones. Además, el acceso a Internet fue reducido y se barrió la señal de los móviles en las zonas periféricas al campus, lo que complicó el acceso a la información fidedigna, pero no impidió la movilización de los opositores.
Aún así, las páginas afines al movimiento verde como Mowjcamp permanecieron activas e informaron sobre detenciones de activistas. Desde que el pasado junio estallaron las multitudinarias manifestaciones en contra de los resultados electorales, los movimientos opositores reformistas ha aprovechado efemérides como el día de Jerusalén o el asalto a la embajada de EE.?UU. en 1979 para retomar sus protestas.
El pretexto del que se valieron ayer fue la muerte, en 1953, de tres estudiantes durante la cruenta represión ordenada por el entonces Sha de Persia, Mohamad Reza Pahlevi, de una manifestación en contra de la visita a Teherán del vicepresidente de Estados Unidos, Richard Nixon. Desde hace años, el 7 de diciembre se ha convertido en una fecha para la reivindicación estudiantil de mayor libertad, reforma y apertura.