Piden al país que siga el proceso de reformas, especialmente para luchar contra la corrupción y asegurar la independencia del poder judicial.
08 dic 2009 . Actualizado a las 14:13 h.La Unión Europea (UE) iniciará las negociaciones de adhesión con Macedonia durante la presidencia española, aunque siguen pendientes las diferencias de ese país con Grecia debido a su nombre, dijeron hoy fuentes diplomáticas. Los ministros de Exteriores comunitarios debatieron hoy la evolución de Macedonia según el informe que presentó la Comisión Europea (CE) sobre los países candidatos al ingreso.
La CE recomienda la apertura de las negociaciones y el Consejo acordó que tomará una decisión en este sentido durante la presidencia española del primer semestre del año próximo, según un comunicado. Las fuentes añadieron que la cumbre de jefes de Estado y Gobierno comunitarios del jueves y viernes próximos podría comenzar a tratar la cuestión del nombre del país balcánico a fin de intentar evitar un bloqueo como el que impide desde 2008 el ingreso (ya acordado) de Macedonia en la OTAN.
Grecia argumenta su bloqueo en que el término Macedonia es exclusivamente helénico y que el uso de ese nombre el país vecino podría suponer pretensiones territoriales hacia la región griega del mismo nombre. Ambos países mantienen el conflicto desde que Macedonia proclamó su independencia de la antigua Federación Yugoslava en 1991, y el país fue reconocido por la ONU en 1993 bajo el nombre provisional de Antigua República Yugoslava de Macedonia (ARYM).
El Consejo de Ministros de la UE señaló hoy los «recientes acontecimientos positivos» en las relaciones bilaterales entre Atenas y Skopje, en referencia al aumento del diálogo entre ambos países. En cuanto a la evolución de Macedonia, destacó que el país ha hecho progresos durante el último año, tanto con la celebración de las elecciones locales de 2009 como con la aplicación sin problemas del Acuerdo de Estabilización y Asociación con la UE, considerado la antesala del ingreso en la Unión.
Aún así, la UE instó a Macedonia a continuar el proceso de reformas, especialmente para luchar contra la corrupción y asegurar la independencia del poder judicial.