La ola de violencia se extiende por Londres y otras ciudades británicas

Agencias

INTERNACIONAL

Por tercer día consecutivo, bandas de incendiarios convirtieron calles enteras en un infierno en llamas.

09 ago 2011 . Actualizado a las 18:34 h.

La ola de violencia registrada en Londres desde el sábado se ha extendido a numerosas zonas de la capital británica y a otras ciudades de todo el país. Ante los acontecimientos, el primer ministro, David Cameron, ha suspendido sus vacaciones y ha convocado una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional.

Por tercer día consecutivo, bandas de incendiarios convirtieron las calles de la ciudad en un infierno en llamas. Después de que la ola de violencia se extendiera en el norte y sur de Londres, también se registraron durante la noche disturbios en el oeste y este de la metrópolis, así como en las ciudades de Birmingham y Liverpool.

«Lo que está ocurriendo aquí no puede ser disculpado», indicó la comandante de Scotland Yard, Christine Jones. Según la agencia PA, en Ealing, en el oeste de Londres, jóvenes enmascarados incendiaron cubos de basura y rompieron vidrieras. «Parece una zona de guerra», relató un testigo. Del mismo modo, en el barrio de Croydon, llamas de varios metros de altura cubrían una mueblería. También en los barrios de Clapham, Peckham, Hackney y Lewisham comenzaron a registrarse disturbios esta mañana.

En Birmingham, la primera ciudad afectada fuera de Londres, grupos enmascarados saquearon joyerías y comercios de venta de artículos electrónicos, y, durante la noche, incendiaron un puesto policial. En Liverpool se sucedieron similares escenas caóticas, que la policía calificó de «brotes aislados» de violencia. Varios testigos afirmaron que cientos de enmascarados paraban en las calles a los vehículo, hacían bajar a sus pasajeros y los incendiaban.

David Cameronregresará a la capital británica tras suspender sus vacaciones en la Toscana. Lo mismo han hecho el viceprimer ministro Nick Clegg y la ministra del Interior Theresa May. Por su parte, el alcalde de Londres, Boris Johnson, retornará a la capital mañana martes.

Según la policía, Londres ha vivido su noche más violenta

La Policía Metropolitana de Londres aseguró que los niveles de violencia vividos ayer en varios barrios fueron «inaceptables» y que en las próximas 24 horas desplegará «más de 13.000 agentes» para resguardar el orden en las calles de la capital. La policía respondió en la madrugada del martes con la mayor operación desplegada en las tres noches de altercados que sufre la capital, con un despliegue de aproximadamente 2.500 agentes, que se sumaron a los 3.500 que ya estaban operativos en distintos barrios.

Scotland Yard señaló que entre sus efectivos se incluyen refuerzos de otros cuerpos, así como vehículos blindados que sirvieron de apoyo a los agentes para despejar las calles, si bien no pudieron contener la violencia. La policía indicó que en los próximos días estudiará todas las pruebas, incluidas las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en las calles, para llevar ante la justicia a los responsables de actividades delictivas.

Además de 44 agentes heridos, en los altercados resultaron heridas 14 personas, entre ellas un hombre de unos 60 años que sufrió lesiones graves en la cabeza. El comunicado indicó también que en las últimas 24 horas habían recibido casi un «400 por ciento» más de llamadas al 999, número de emergencia en Londres. Por su parte, el Servicio de Bomberos de Londres informó de que vivió la jornada «más intensa» de su historia al recibir un volumen quince veces mayor de llamadas de lo habitual.

Ola de disturbios tras la muerte de Mark Duggan

Los disturbios surgieron durante la manifestación en protesta por la muerte de Mark Duggan, un hombre de 29 años que murió la semana pasada tras recibir un disparo de la policía, acusada de racismo. No está claro si la víctima, a la que se le atribuían vínculos con el mundo de las drogas y las bandas criminales, abrió fuego contra los agentes. Según la policía, el hombre disparó desde un taxi contra los agentes en un control.

A raíz de esto, alborotadores de todas las etnias incendiaron en Tottenham oficinas, viviendas, supermercados, automóviles policiales y un autobús, y además saquearon comercios. Algunas casas se quemaron hasta los cimientos, dejando a familias sin techo. «Esto no tiene absolutamente nada que ver con la muerte de Mark Duggan», apuntó el viceprimer ministro, para quien la violencia registrada en los últimos días es «totalmente inaceptable».

La familia de Duggan se distanció a través de un comunicado de la violencia destada en las últimas noches y negó que el hombre hubiese disparado a la policía. Según los agentes, los jóvenes organizan grupos «pequeños e itinerantes» a través de Internet. Según algunos testigos, se ponen en contacto y organizan a través de smartphones y se trasladan rápidamente de un lugar a otro de la ciudad. Ese sería uno de los motivos por los que la policía estaría teniendo tantos problemas para controlarlos. Scotland Yard amenazó con multar a quienes llamen a la violencia a través de la red social Twitter.