Junto a Muamar el Gadafi habría sido detenido su hijo Mutasim, que según el canal Al Arabiya también está muerto. Sobre su otro hijo, Saif al Islam, el llamado a heredar las riendas del poder y que antes de la caída de Trípoli se convirtió en la cara mediática del régimen, anoche nada estaba claro. Mientras unas fuentes lo dan por muerto y otras por herido, el líder del CNT, Mahmud Yibril, afirmó que estaba cercado en una aldea cercana a Sirte.
La cadena emiratí Al Arabiya mostró ayer una foto del supuesto cadáver de Mutasim, en el que aparece tumbado en una camilla, con barba y el pelo largo y con lo que parece una marca de un disparo de bala en el pecho. La cadena no mostró imágenes de Saif al Islam, pero aseguró que su cadáver estaba anoche en el aeropuerto de Misrata.
Mohamed Leith, comandante de las fuerzas del nuevo régimen, indicó a la agencia AFP, que Mustasim fue hallado muerto en Sirte. «Lo hemos encontrado muerto. Hemos colocado su cuerpo, así como el de [el exministro de Defensa] Abubakr Yunes Jaber en una ambulancia para llevarlos a Misrata», dijo el oficial. Mutasim, médico de formación, había asumido el papel de consejero de seguridad de su padre y, según los dirigentes rebeldes, él era el responsable de las brigadas fieles al antiguo régimen que combatían contra las fuerzas del CNT en Sirte, ciudad natal del líder libio.
De confirmarse oficialmente estas muertes, de los ocho hijos biológicos de Gadafi, cuatro de ellos, Mutasim, Saif al Islam, Jamis y Saif al Arab han muerto, y cuatro -Saadi, Mohamed, Aisha y Hanibal- han logrado escapar a Níger y Argelia.
También se informó de la muerte del jefe de los servicios secretos, Abdalá al Senusi, que iría en el mismo convoy de Gadafi. El jefe de los servicios de seguridad interior, Mansur Dau, resultó herido y llevado al hospital de Misrata, donde pereció.