El líder golpista pide que se restaure a Somare como primer ministro de Papúa

EFE

INTERNACIONAL

Papúa Nueva Guinea se encuentra en medio de una crisis institucional sobre quién debe ocupar la jefatura del Gobierno.

26 ene 2012 . Actualizado a las 11:07 h.

El líder de los militares sublevados en Papúa Nueva Guinea, el coronel retirado Yaura Sasa, pidió hoy que se restaure a Michael Somare como primer ministro, en medio de una crisis institucional sobre quién debe ocupar la jefatura del Gobierno.

«Hago un llamamiento al jefe de Estado (el gobernador general Michael Ogio) para restaurar inmediatamente en el poder a Sir Michael (Somare)», exigió Sasa, según la emisora australiana ABC.

El coronel retirado comanda a la veintena de soldados armados que se sublevaron, sin causar derramamiento de sangre, alrededor de las 03.00 hora local.

Primero irrumpieron en el acuartelamiento de Taurama y después se trasladaron a la sede de las Fuerzas Armadas, el cuartel de Murray, donde apresaron al máximo jefe militar, el general Francis Agwi.

Sasa, quien se ha autoproclamado jefe de las Fuerzas Armadas, dio un plazo de siete días al Parlamento para que se reúna y resuelva la crisis de los dos primeros ministros: Somare, reconocido por el Tribunal Supremo, y Peter O'Neill, respaldado por el Legislativo y el gobernador Ogio, según la ABC.

El viceprimer ministro papuano, Belden Namah, aseguró a los periodistas poco después del levantamiento en Port Moresby que Sasa carece del apoyo del Ejército y que su intentona golpista no va a prosperar.

Namah, antiguo militar, señaló que la acción del Sasa y los soldados que le siguen se castiga con la pena capital y aconsejó al coronel rebelde que se entregue.

La intentona golpista se produce en medio de una grave crisis política en Papúa Nueva Guinea desde que el Tribunal Supremo ordenó la restitución de la jefatura del Gobierno a Somare, el pasado diciembre.

Somare, quien asumió la jefatura del Gobierno de Papúa Nueva Guinea tras la independencia en 1975 y llevaba en el cargo ininterrumpidamente desde las elecciones de 2002, tuvo que someterse a un largo tratamiento en Singapur el año pasado por problemas cardíacos.

El 2 de agosto, pasados más de cuatro meses sin que regresara, el Parlamento declaró vacante la jefatura del Gobierno y eligió para el cargo a O'Neill.

Somare, a su regreso en septiembre, recurrió al Supremo y la alta magistratura falló en su favor el 12 de diciembre.

Desde entonces, Somare y O'Neill han mantenido un pulso para ver quién tenía más apoyos.

El gobernador Ogio reconoció a Somare, pero unos días después, el 19, se desdijo y confirmó a O'Neill como primer ministro del país.

Sasa explicó desde el cuartel Murray que su deber es «restaurar la integridad y el respeto de la Constitución y el Poder Judicial».

Las puertas del cuartel Murray, en la capital papuana, permanecen cerradas, y se espera que O'Neill se acerque al lugar con las tropas leales a él.

El Ministerio de Exteriores de Australia emitió hoy una alerta instando a sus ciudadanos a evitar viajar a Port Moresby debido a «disturbios» en los cuarteles militares.

Un portavoz del Ministerio de Exteriores de Australia dijo a la agencia AAP que la situación es preocupante e «instó a que se resuelva la situación tan pronto sea posible y que se restituya la cadena de mando de las fuerzas armadas papuanas».

El alto comisionado de Australia en Papúa Nueva Guinea, Ian Kermish, ha hablado con O'Neill, quien le ha asegurado que se han adoptado los pasos necesarios para resolver el conflicto, mientras que funcionarios consulares han dialogado con Agwi, agregó la AAP.