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Mitt Romney presiona a sus rivales para que tiren la toalla

victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Llega al caucus de Illinois con el impulso de la victoria en Puerto Rico

20 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

«Illinois es un estado en el que el gobernador Romney tiene una ventaja aplastante». Quien decía el domingo esas palabras no era un colaborador de Romney, ni siquiera uno de sus seguidores: las pronunció en la cadena Fox su rival más directo, Rick Santorum. Y dan una idea clara de cómo están las cosas para las primarias de hoy en ese estado. Según las encuestas, la ventaja de Romney en intención de voto es de más de quince puntos sobre Santorum.

Además, Romney llega a Illinois aupado por la aplastante victoria del domingo en Puerto Rico, donde recibió más del 80 % de los votos. Claro que Santorum se lo puso fácil con su metedura de pata sobre el español. Y es que el candidato ultraconservador declaró que los puertorriqueños deberían decantarse por el uso del idioma inglés si quieren convertirse en un estado de pleno derecho de Estados Unidos. Después de eso, Puerto Rico le dio a Romney 20 delegados más para la convención a pesar de que los habitantes de la isla no pueden votar en las elecciones presidenciales estadounidenses.

Romney suma, de este modo, 521 delegados, más que los del resto de los candidatos juntos. Este hecho y sus últimas victorias han conseguido que cada vez más voces pidan que Santorum, Gingrich y Paul abandonen las primarias para poder así unirse contra Obama. Ayer mismo fue el propio Romney el que lo pidió, aunque a través de su esposa Ann. «Llegó la hora de que respaldemos a un único candidato y avancemos juntos hacia el próximo desafío, derrotar a Barack Obama», dijo la mujer de Romney en un suburbio de Chicago.

No cabe duda de que esas voces aumentarán a partir de esta noche si, como es previsible, Romney obtiene una gran victoria en Illinois. Santorum volvió a repetir ayer que seguirá hasta la convención de agosto, pero eludió contestar a la pregunta de si en la convención lucharía contra Romney si este no lograse obtener antes el número suficiente de delegados. Pero es que mientras Romney espera que hoy sea por fin su gran día, Santorum tiene sus ojos puestos en Luisiana, que celebra primarias el sábado y donde él tiene muchas más posibilidades de imponerse. Aún así, cada día que pasa los análisis políticos dan mayor ventaja a Mitt Romney.