El ejército retira la alambrada que cercaba el Palacio Presidencial
07 dic 2012 . Actualizado a las 22:59 h.La oposición no islamista de Egipto, unida en el «Frente de Salvación Nacional», rechazó hoy participar en el diálogo propuesto por el presidente del país, Mohamed Mursi, al considerar que sus demandas no han sido escuchadas.
En un comunicado, el grupo explicó que la convocatoria de diálogo «carece de los elementos básicos de una negociación verdadera y seria e ignora las reivindicaciones principales del Frente», que son la anulación del acta constitucional y la cancelación del referéndum sobre la Constitución. «El discurso de Mursi fue decepcionante para la mayoría del pueblo egipcio», aseguró la formación opositora en su nota, en la que criticaron que el presidente negara que «la sangre egipcia pura derramada en las afueras del Palacio Presidencial es consecuencia de la incitación explícita de los Hermanos Musulmanes».
En cuanto a estos choques entre partidarios y detractores de Mursi, que se saldaron el pasado miércoles con seis muertos y centenares de heridos, el «Frente de Salvación Nacional» pidió que sean investigados por «un juez neutro» y se presenten a los implicados ante la justicia «sea cual sea su cargo político o policial». «El Frente continuará empleando todos los medios legítimos para defender sus derechos y sus libertades y corregir la vía de la revolución para construir un Egipto que se base en la libertad, la justicia social y la dignidad humana», subraya el texto.
Este grupo, compuesto por el Partido de la Constitución, encabezado por el Premio Nobel de la Paz egipcio Mohamed el Baradei, y al Partido Corriente Popular, del excandidato presidencial Hamdin Sabahi, entre otros, convocó nuevas protestas para hoy. Las principales demandas de estas manifestaciones es que Mursi revoque el acta constitucional que blinda sus poderes ante la Justicia y anule la convocatoria del referéndum sobre la Carta Magna previsto para el próximo 15 de diciembre.
Los manifestantes han comenzado a reunirse en la plaza cairota de Tahrir, donde desde hace dos semanas se mantiene una acampada, así como a marchar desde varias mezquitas de El Cairo hacia el Palacio Presidencial, situado en el acomodado barrio de Heliopolis. La sede de la Presidencia está custodiada desde ayer por tanques y carros del Ejército, que ha instalado alambradas en los alrededores para evitar nuevos disturbios
La Guardia Republicana egipcia retiró hoy la alambrada que cercaba el Palacio Presidencial, lo que permitió a las decenas de miles de manifestantes de la oposición que se encuentran en la zona acercarse hasta el muro del complejo. Miembros de la Guardia Republicana retiraron la alambrada mientras los manifestantes gritaban «El Ejército y el pueblo son una sola mano» y «Pacífica, pacífica», en referencia a la marcha, según pudo constatar Efe. Pese a la retirada de la alambrada, los efectivos del orden mantienen su despliegue junto al palacio, apoyados por varios carros blindados, a los que se han subido algunos participantes en la protesta en un ambiente festivo.
El vicepresidente egipcio, Mahmud Meki, afirmó hoy que el jefe del Estado, Mohamed Mursi, está dispuesto a aceptar, con condiciones, un aplazamiento del referéndum sobre la Constitución, previsto para el próximo día 15. En declaraciones a las ediciones digitales de los diarios Al Ahram y Al Masry al Youm, Meki dijo que «el presidente está dispuesto a aceptar el retraso del referéndum con la condición de que blinde este aplazamiento de (posibles) recursos ante la Justicia».