Primera movilización contra la política del Gobierno de Letta

María Signo ROMA / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Los sindicatos y la izquierda le exigen centrarse en la creación de empleo

19 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Toda la oposición de izquierdas al Gobierno de Enrico Letta se dio cita ayer en la manifestación convocada en Roma por la Federación de Operarios Metalúrgicos (Fiom) y apoyada por otros sindicatos, para pedir al Ejecutivo que abandone la política de recortes y se centre en la creación de empleo. «No es una manifestación contra nadie, sino una movilización para poner el trabajo en el centro de la agenda política y acabar con la austeridad», explicó Maurizio Landini, secretario de Fiom, en el mitin que cerró la protesta.

Para Landini, en Italia hoy es más importante la creación de empleo que la abolición de tasas como la de la vivienda (Imu) o la refinanciación de la deuda. El riesgo que se corre, según el sindicalista, es el de un Gobierno «bloqueado por el chantaje de Berlusconi». Por ello considera insuficientes las primeras medidas tomadas el viernes por Letta, porque «no nos hacen salir de la emergencia y mirar al futuro». La Fiom presentó un manifiesto programático con los objetivos a alcanzar y que son: reconquistar los derechos del trabajador, reconversión ecológica del sistema industrial, inversión pública y privada y el bloqueo de los despidos, a través de la incentivación de medidas como la reducción del horario.

Entre las 100.000 personas, entre ellas muchos jóvenes, que salieron de plaza de la República y se dirigieron a San Juan de Letrán bajo el lema «No podemos esperar más», estaban líderes como Nichi Vendola, de Izquierda, Ecología y Libertad (Sel), así como una representación de diputados del Movimiento 5 Estrellas y un grupo de intelectuales, entre ellos el candidato del M5E a la presidencia de la República, Stefano Rodotá, que fue acogido con gritos de «presidente, presidente» durante su intervención en el mitin.

Muy criticada fue la ausencia del PD, sobre todo de su nuevo secretario, el exsindicalista Guglielmo Epifani, aunque no faltaron algunos representantes del sector más crítico del partido que acudieron a la manifestación a título personal.