José María Villalta: «El fantasma de Chávez desvela a mis rivales»

María Isabel Sánchez SAN JOSÉ / AFP

INTERNACIONAL

Es el favorito en las encuestas de cara a las elecciones generales del domingo

01 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El fantasma de Hugo Chávez planea en la campaña de Costa Rica, que el domingo celebra elecciones con el candidato de la izquierda, José María Villalta, como uno de los favoritos. Villalta, un ecologista y diputado de 36 años, es atacado por sus adversarios por supuestas simpatías con el chavismo, pero él afirma que no copiará modelos porque Costa Rica tiene su propia tradición socialista.

-¿Cómo interpreta el ascenso de la izquierda en la Costa Rica tradicionalmente conservadora?

-El pueblo está cansado de la corrupción de los últimos gobiernos, pero también quiere un cambio de la política económica neoliberal de los últimos 30 años. Reclama que el país recupere una senda de desarrollo equilibrado, de justa distribución de la riqueza y mi partido lidera esas aspiraciones.

-¿Qué modelo de la izquierda latina siente más cercano?

-Costa Rica tiene su propia tradición de desarrollo de un socialismo a la tica. En los países que giraron a la izquierda hay cosas que se han hecho bien, como la reducción de la pobreza y la desigualdad; y también mal en el manejo económico o de libertades ciudadanas. Para que los cambios sean sostenibles, debemos impulsar liderazgos más participativos, menos caudillistas.

-¿Ha pesado el fantasma de Chávez en su campaña?

-El fantasma de Chávez desvela a mis rivales políticos, que tienen pesadillas, desayunan, almuerzan y cenan con él. Hay algunas fuerzas políticas muy interesadas en que hablemos de lo que pasa en Venezuela para que no hablemos de lo que pasa aquí y del desastre que han hecho los que han tenido el poder.

-¿Cuáles son los retos para un eventual gobierno suyo?

-Articular la política social con la política económica, de la mano del combate a la corrupción.

-¿Cómo serían las relaciones con Washington?

-No aceptamos injerencias de ningún Gobierno extranjero, pero aspiramos a fortalecer los lazos de cooperación y diálogo.

-¿Y los nexos con China?

-Fue un acierto porque es un gigante de la economía mundial. El problema es la relación vergonzosa, de pedigüeñería, de estar viajando nuestros políticos a China para ver qué les dan.