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Vuelo MH370: Los últimos objetos encontrados tampoco pertenecen al vuelo MH370

La Voz AGENCIAS

INTERNACIONAL

KIM KYUNG-HOON

Estas últimas pistas resultaron ser utensilios de pesca

31 mar 2014 . Actualizado a las 21:28 h.

La frustración continúa dominando la búsqueda del desaparecido vuelo MH370. Los últimos objetos que sembraron algo de esperanza y que fueron avistados el domingo en el agua por los aviones de búsqueda, resultaron ser utensilios de pesca, confirmó el lunes la Autoridad de Seguridad Marítima Australiana (AMSA).

Después de que los objetos recuperados de las aguas del Índico el sábado resultaran no pertenecer al vuelo MH370, la esperanza se había puesto en los nuevos avistamientos hallados el domingo, unos objetos de color naranja y de más de dos metros de longitud que habían sido calificados como «las pistas más prometedoras» hasta el momento.

Sin embargo, cuando los barcos consiguieron sacarlos del agua se confirmó que tampoco pertenecían al Boeing 777-200 de Malaysia Airlines del que se perdió el rastro el pasado 8 de marzo.

«Los hallazgos del domingo no eran nada destacables, nada relacionado con el avión», aseguró un portavoz de la autoridad de seguridad marítima.

El primer ministro australiano, Tony Abbott, reiteró el lunes que pese a la falta de resultados hasta ahora, no abandonará la búsqueda del vuelo MH370: «Se lo debemos a los familiares, a todos los pasajeros, a los gobiernos de los países cuyos ciudadanos viajaban en el avión», declaró el responsable desde Perth, lugar desde donde se coordinan las operaciones.

Abbott volvía a declarar que no hay un límite de tiempo para la operación en la que se intentan ubicar los restos del Boeing 777-200 que despegó de Kuala Lumpur el 8 de marzo con destino a Pekín con 239 personas a bordo y que desapreció poco después.

Inquieta la señal de las cajas negras

Diez aviones y diez barcos de siete países distintos luchan contra el tiempo y los nervios de los familiares en un área situada a 1.800 kilómetros al oeste de Perth, intentando localizar el vuelo MH370 antes de que expire la señal emitida por las cajas negras del avión, algo que podría ocurrir en torno al 7 de abril.

«Es una tarea extremadamente difícil», dijo Abbott. «Estamos buscando en un área enorme del océano y hasta ahora podemos basarnos en muy poca información», señalaba, y además añadía: «Hasta que localicemos piezas del Boeing 777-200 y hagamos análisis que nos diga donde cayó al océano estaremos operando en base a estimaciones aproximadas».

La embarcación de rescate Ocean Shield partía este lunes para sumarse a la búsqueda del vuelo MH370, informó la AMSA. El barco lleva a bordo un sistema especial capaz de localizar la señal que emiten las cajas negras a hasta 6.000 metros de profundidad. Sin embargo, tardará algunos días en llegar a la zona del océano en la que se ha concentrado la búsqueda. Según Amsa, en algunas de esas zonas este lunes se esperan lluvias.

Mientras tanto, el primer ministro de Malasia, Najib Razak, anunció que viajará esta semana Australia.

Najib se trasladará el miércoles a Perth para visitar una base de la Fuerza Aérea y ver de primera mano las operaciones de búsqueda, además de hablar sobre su coordinación. También quiere agradecer a los equipos que participan en ella.

Malasia continúa asumiendo la responsabilidad principal de la operación de rescate y la investigación sobre las causas del cambio de rumbo hacia el Índico en lugar de seguir la ruta de Kuala Lumpur a Pekín.

«El hecho más extraño de la historia de la aviación»

Por otro lado, un comentarista del diario estatal China Daily pidió el lunes calma a los familiares del desaparecido vuelo MH370 de Malaysia Airlines y subrayó que es seguro que el avión se estrellara, pese a no haberse encontrado sus restos.

«Da igual lo afligidos que estemos o cuántos detalles aún no estén claros, es seguro que el vuelo MH370 se estrelló en el océano Índico y que nadie sobrevivió», señala el comentario. «No podemos dejar que el enfado se imponga a los hechos y a la razón».

Aunque el gobierno de Malasia se haya mostrado «bastante poco hábil» al hacer frente al accidente, hay que reconocer que «quizás se trate del hecho más extraño en la historia de la aviación civil asiática». En vista de la crisis sin precedentes es comprensible que un país en desarrollo como Malasia «no supiera qué hacer», añade el comentario.

Dos tercios de las 239 personas que iban a bordo eran de nacionalidad china. Las familias chinas han sido muy críticas con el gobierno de Kuala Lumpur y han realizado diversas protestas, entre ellas ante la embajada malasia en Pekín.