Los servicios secretos israelíes pincharon el teléfono del jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, cuando negociaba un acuerdo de paz con los palestinos el pasado año, que terminó en fracaso. Esta revelación, hecha ayer por el semanario alemán Der Spiegel, vuelven a poner a prueba las ya tensas relaciones entre Netanyahu y Obama.
Kerry hablaba con regularidad con altos responsables políticos durante sus giras en Oriente Medio a través de líneas protegidas, pero también por teléfonos con conexiones satélite, más vulnerables al espionaje, según Der Spiegel, que cita «varias fuentes dentro de los servicios secretos». «El Gobierno de Jerusalén usó esta información en las negociaciones para obtener información privilegiada de cara a las negociaciones buscar una solución diplomática en Oriente Medio», asegura el semanario.