Combates entre el Ejército y milicianos hutíes en torno al palacio presidencial en Yemen

EFE

INTERNACIONAL

Residentes del bario Al Sabain, donde se ubica el palacio en Saná, dijeron que, desde esta madrugada, se escuchan en la zona disparos y explosiones, sin que por el momento se conozca una cifra de víctimas

19 ene 2015 . Actualizado a las 16:06 h.

Duros enfrentamientos estallaron hoy entre las fuerzas de la guardia presidencial yemení y milicianos del grupo chií de los hutíes en las inmediaciones del palacio presidencial en Saná, en medio del aumento de la tensión entre este movimiento y el presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi.

Residentes del bario Al Sabain, donde se ubica el palacio, dijeron a Efe que, desde esta madrugada, se escuchan en la zona disparos y explosiones, sin que por el momento se conozca una cifra de víctimas.

Desde el domingo hay un gran despliegue de tanques y vehículos blindados pertenecientes a las fuerzas de la guardia presidencial en torno al palacio, que es usado para las reuniones y no como residencia de Hadi.

Entre temores a un intento de golpe de Estado, también se reforzaron las tropas para proteger la vivienda del mandatario en el oeste de Saná.

Los hutíes por su parte establecieron puestos de control en las calles que conducen al barrio Al Sabain.

El movimiento chií controla desde septiembre pasado la capital yemení y su provincia, así como otras seis regiones del país.

Ante el incremento de la inestabilidad, el presidente yemení ordenó ayer al Ejército yemení proteger Saná.

Esta decisión fue adoptada después de que los hutíes secuestraran el sábado al director de la oficina del presidente, Ahmed Auad Mubarak, y amenazaran con más acciones similares.

La expansión militar de los rebeldes chiíes forzó en septiembre pasado la formación de un nuevo Gobierno en Yemen, y la firma de varios acuerdos con la Presidencia para poner fin al conflicto.

Pero los hutíes, que ya se alzaron en armas contra las autoridades en varias ocasiones entre 2004 y 2010, no han respetado el punto que exige la retirada de sus milicianos de las ciudades.