Tusk se justifica por la convocatoria de una minicumbre sobre Grecia tras las quejas de los líderes europeos

Europa Press

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STEPHANIE LECOCQ | Efe

Alega que la situación de Atenas es «muy difícil» y que la reunión había sido solicitada por Alexis Tsipras

20 mar 2015 . Actualizado a las 01:02 h.

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha tenido que justificarse este jueves, al inicio de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los 28, por haber convocado una reunión restringida sobre la situación en Grecia -a la que solo están invitados Francia, Alemania y las instituciones de la UE- ante las quejas que esta decisión ha provocado entre el resto de líderes europeos, en particular los de los países del Benelux.

De hecho, los primeros ministros de Bélgica, Luxemburgo y Holanda han protestado oficialmente ante Tusk, durante una reunión previa al inicio del Consejo Europeo, por no estar invitados a esta minicumbre sobre Grecia, según han informado fuentes diplomáticas. Otros líderes europeos han secundado esta queja, aunque el primer ministro belga, Charles Michel, ha sido el único en declararse «furioso» en público.

Finalmente, la polémica generada por la minicumbre ha sido la primera cuestión que se ha abordado en el Consejo Europeo, pese que no estaba en la agenda. Tusk ha alegado ante los líderes europeos que la situación en Grecia es «muy difícil» y que la reunión había sido solicitada por el primer ministro griego, Alexis Tsipras.

El presidente del Consejo Europeo ha defendido además que en la reunión estarán representadas las instituciones europeas, que defienden el interés común, y que no se adoptará ninguna «decisión formal». Finalmente, Tusk se ha declarado dispuesto a convocar en cualquier momento una cumbre del Eurogrupo, pero ningún líder le ha pedido que lo haga, según las fuentes consultadas.

En la minicumbre sobre Grecia, que se celebrará el jueves por la noche tras la conclusión de la primera jornada del Consejo Europeo, participarán la canciller alemana, Angela Merkel, el presidente francés, François Hollande, y los presidentes del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de la Comisión, Jean-Claude Juncker, y del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.