El presidente critica al PSOE por dar poder en ciudades a «Syriza-Podemos»
30 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Mariano Rajoy lanzó ayer un mensaje de tranquilidad a los españoles porque lo que está sucediendo en Grecia no afectará a nuestro país gracias a «una política seria» y a las reformas realizadas. «España y los españoles pueden estar tranquilos, entre otras razones porque a lo largo de los últimos años, con su esfuerzo, dedicación, trabajo y comprensión han apoyado las reformas llevadas a cabo», aseguró el presidente del Gobierno. «Es la diferencia entre las políticas serias y las que no son tan serias y llevan a lo que estamos viendo hoy en día en Grecia, a que la gente no pueda sacar su dinero», sentenció.
Rajoy también aprovechó para echar en cara a Pedro Sánchez sus pactos con Podemos. «Hemos perdido grandes capitales porque el PSOE ha preferido darle a Syriza-Podemos el poder antes que dejar gobernar a quien había ganado», señaló confirmando que, desde que hace cinco meses Syriza ganó las elecciones, Grecia se ha convertido en un asunto importante de la política nacional española. Tras el órdago de Tsipras, lo es aún más.
Podemos emitió un comunicado en el que defendía la reacción «ejemplar» del Gobierno griego ante «el ultimátum y el chantaje de los acreedores». Rafael Mayoral denunció el «chantaje inaceptable» a Grecia por parte del FMI y el Banco Central Europeo y criticó la «nefasta» imagen que está dando Rajoy actuando como un «gobierno colonial» al «servicio de Merkel».
Preguntado por esos elogios de la formación de Pablo Iglesias en contraposición a su presunta sumisión hace dos años cuando España recibió el rescate bancario, Mariano Rajoy respondió con ironía diciendo que «hay que oír de todo en la vida» y subrayando que eso no es lo que opinan el cien por cien de los gobiernos de la zona euro. Abogó por perseverar en «políticas serias» y no en las de «Podemos-Syriza».
Críticas a los populismos
El expresidente del Gobierno José María Aznar y la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, también se emplearon a fondo en la apertura del campus de FAES en poner de ejemplo lo que está sucediendo en Grecia para arremeter contra los populismos y advertir del riesgo de que estas opciones llegaran a gobernar en España, en clara referencia a Podemos. Cospedal afirmó que lo que está pasando en ese país muestra que quienes prometen quimera sociales y económicas generan una gran frustración.
Por su parte, Pedro Sánchez pidió a Rajoy que tenga una «posición constructiva», no como ha hecho hasta ahora, para evitar que Grecia salga del euro, lo que dijo sería un «fracaso absoluto» y tendría consecuencias dantescas». Pero también exigió al Gobierno de Alexis Tsipras que abandone su «retórica frentista» y cumpla con sus deberes.
Crisis en Europa
«España afronta esta crisis con normalidad»
El Gobierno trató ayer de mandar un mensaje de tranquilidad ante la crisis griega. Lo hizo por partida triple: además de Rajoy, hablaron Soraya Sáenz de Santamaría y Luis de Guindos. «España tiene bancos saneados, un déficit público mucho más reducido, una balanza de pagos con superávit, exportaciones que crecen... Esa es la principal garantía», dijo De Guindos, quien descartó que se vayan a adoptar medidas, sobre todo en el sector financiero. España, dijo la vicepresidenta, aborda «este momento con absoluta normalidad, con solvencia y naturalidad». Foto a. comas Reuters
Podemos mantiene su línea de apoyo a Tsipras y al referendo
Ante la ofensiva del PP, que ha aprovechado la deriva de la crisis griega para atacar a Podemos, los dirigentes de esta formación salieron ayer en tromba para denunciar las postura del Gobierno y defender la postra de Syriza. Entre ellos, el exnúmero tres de Podemos, Juan Carlos Monedero, que advirtió de que nadie se piense que puede mirar a Grecia «de lejos». «Su suerte es la de todos y cada uno de los europeos», afirmó.
Monedero considera que la decisión de Tsipras de convocar el referendo «es la correcta» y eso, a su juicio, es lo que le da «miedo» a la troika así como al FMI. «Les da miedo que haya todo un pueblo que diga: no queremos sus políticas porque nos están condenando al hambre», subrayó en declaraciones a Europa Press Televisión. «En un continente que se reclama como cuna de la democracia; cuando hay que tomar decisiones que afectan al conjunto de los ciudadanos, preguntemos al conjunto de los ciudadanos, y eso lo que está haciendo ahora Tsipras», sentenció. El politólogo aseguró que, si Europa no asume que la deuda acumulada «no es pagable», los ciudadanos van a seguir siendo los «rehenes» de los sectores financieros.