La inspección de EE.UU. pide abrir una causa criminal contra Clinton

victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

CHRIS KEANE | Reuters

Insta a investigar los correos que envió cuando era secretaria de Estado

25 jul 2015 . Actualizado a las 20:11 h.

Dos inspectores generales del Gobierno estadounidense, uno del Departamento de Estado y otro de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, han enviado un escrito al Departamento de Justicia en el que piden que se investigue a Hillary Clinton por el uso que hizo de información que podría estar clasificada a través de su correo electrónico personal durante su etapa como secretaria de Estado.

La fiscalía no ha decidido aún si investiga a la favorita de los demócratas, pero la noticia vuelve a centrar la atención pública en un asunto que puede hacerle mucho daño en su campaña para las primarias. Clinton se perfila como la clara vencedora de un proceso que la convertiría en la candidata de unas presidenciales que, según las encuestas, tendría muchas posibilidades de ganar... si consigue salir indemne de los asuntos que la salpican, aunque este de los e-mails se le está complicando mucho.

El escándalo estalló en marzo, cuando se supo que durante su etapa como secretaria de Estado no usó su correo electrónico oficial, sino uno privado. El problema residen en que, mientras el primero está conectado a un servidor que tiene las máximas garantías de seguridad, el privado dependía de un servidor del que se desconoce la seguridad. Clinton defendió entonces que nunca había enviado información clasificada y entregó todos los mensajes -30.000, que ocupan 55.000 páginas impresas- que había enviado y recibido durante esa etapa al Departamento de Estado, que desde entonces los está estudiando y va, poco a poco, haciéndolos públicos.

Ya el 29 de junio pasado los dos directores generales que solicitan ahora la investigación habían remitido un informe en el que mostraban su preocupación porque algunos de los mails que el Departamento de Estado estaba liberando contenían información potencialmente sensible. La Casa Blanca explicó entonces que dicho material fue clasificado como secreto tiempo después de que los enviara Clinton, a causa de un cambio en las circunstancias que rodeaban los asuntos de los que trataban.

La respuesta de los republicanos ha sido la misma que desde el inicio de la polémica: piden una investigación en profundidad. Ayer los conservadores volvieron a exigirlo a través de un comunicado remitido al Departamento de Justicia, pero añadiendo la conveniencia de que participe una «tercera parte independiente», ya que Hillary Clinton formó parte del Gobierno que ahora debería investigarla.

Clinton, que reiteró que responderá a cualquier pregunta ante el Congreso, forzó al The New York Times a modificar la información publicada en la web, tras afirmar que estaba plagada de inexactitudes.