Bruselas retuerce los Tratados para evitar la salida del Reino Unido

Cristina Porteiro
Cristina Porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

YVES HERMAN | REUTERS

La CE permitirá a Londres suspender los subsidios de los inmigrantes cuando el país se enfrente a una presión que ponga en riesgo su sistema de bienestar social

30 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Ambiente frío y pocos avances. Así se saldó ayer la reunión entre Jean Claude Juncker y David Cameron. Es sabido que ninguno siente especial aprecio por el otro. Y a pesar de ello, el presidente de la Comisión Europea detalló ayer una propuesta generosa al primer ministro británico para que pueda volver a Londres defendiendo el sí a la UE en el referendo sobre la permanencia a celebrar antes de finales del 2017. 

La iniciativa estrella permitiría al Reino Unido accionar un «freno de emergencia» a la inmigración en situaciones extremas. ¿Cómo? Suspendiendo los subsidios a trabajadores inmigrantes por un período de cuatro años cuando Bruselas constatase que el país se enfrenta a una presión «excepcional» que pone en riesgo su sistema de bienestar social. Londres también tendría que conseguir el respaldo mayoritario de sus socios europeos.

Bruselas ha exprimido al máximo la ley para cuadrar el círculo y diseñar una propuesta que permita sortear las reticencias de los socios europeos a modificar los Tratados y que resulte atractiva a los británicos. Cameron está «esperanzado», pero considera que aún «es insuficiente». 

¿Por qué la propuesta no convence?

Cameron exige devolver competencias a Londres en cuestiones migratorias. No quiere dejar en manos de Bruselas y, en última instancia, de sus socios la posibilidad de decidir cuándo el país retira la ayuda a los inmigrantes o impone cuotas de entrada. Para los tories euroescépticos la propuesta es «una mala broma» y el primer ministro no puede arriesgarse a volver con un acuerdo que nadie vaya a respaldar. 

¿Qué pide Cameron?

La lista de deseos del líder británico recoge cuatro demandas. La más importante es la de permitir al país reducir la presión migratoria y su carga sobre los servicios sociales pero también incluye exigencias para mejorar la competitividad, culminar el mercado interior y excluir al país de cualquier iniciativa que implique más integración o cesión de soberanía, sin ser discriminados por ello.

¿Hay riesgo de que el Reino Unido abandone la UE?

Sí. Lo que empezó siendo una maniobra del premier para mantener a raya a los eurófobos del UKIP y evitar la sublevación del segmento más euroescéptico de su partido se ha convertido en una bomba de relojería. Los conservadores tendrán libertad para hacer campaña por el sí o el no. Los ciudadanos británicos partidarios del Brexit aventajan ligeramente a quienes desean permanecer en la Unión Europea. Londres tiene un pie dentro y otro fuera. Existe un riesgo muy alto de que la negociación, donde intervienen muchos actores, descarrile por accidente.

¿Cuáles son los siguiente pasos?

Cameron recibirá mañana en Londres al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk. El borrador será remitido a los Gobiernos de los 27 el lunes, pero será en la cumbre decisiva del 18 y 19 de febrero donde se intentará cerrar el acuerdo. Si eso ocurre, ya puede comenzar oficialmente la campaña del referendo.