Irán se aleja aún más del pacto nuclear en su intento de presionar a Europa
INTERNACIONAL
Comienza a enriquecer uranio por encima del límite suscrito en el acuerdo del 2015
08 jul 2019 . Actualizado a las 13:09 h.Irán cumple lo anunciado y se aleja un paso más del acuerdo nuclear en su intento de presionar a Europa para que adopte medidas urgentes que le ayuden a superar los castigos impuestos por Donald Trump. Los expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) desplazados a Teherán confirmarán hoy que «el proceso de enriquecimiento superará el 3,67%», el porcentaje suficiente para fines civiles, tal y como adelantó el portavoz de la Organización de la Energía Atómica de Irán, Behruz Kamalvandí.
De momento, la república islámica se fija «un nuevo límite del 5 %», lo necesario para el suministro de combustible para alimentar a las centrales eléctricas del país, según Kamalvandí. Es el segundo gran paso que da Irán en su alejamiento del pacto tras el anuncio hace una semana de que superaba ya los 300 kilogramos de uranio enriquecido. Y no será el último, ya que dentro de otros 60 días llegarán nuevas medidas. El viceministro de Exteriores, Abas Araqchi, se refirió al reactor de agua pesada de Arak, cuya «modernización se ha pospuesto», pero si los firmantes que permanecen en el acuerdo nuclear no logran avances, lo devolverán «a la situación anterior». Arak es clave por su capacidad de producir plutonio.
Preocupación internacional
La salida unilateral de Trump del «peor pacto posible» dio paso a todo un año en el que los iraníes siguieron respetándolo pese a las sanciones. Esto terminó cuando el presidente, Hasán Rohaní, dio un ultimátum de dos meses a los países europeos para que adoptaran medidas que les permitieran superar esas sanciones. Teherán considera que el texto hace posible dejar de cumplir algunos compromisos debido a que uno de los firmantes, Estados Unidos, viola los suyos, y lo está haciendo de forma anunciada y pausada ante la impotencia de Europa.
En la última cumbre de seguimiento del acuerdo celebrada en Viena, la UE presentó el mecanismo de Apoyo al Intercambio Comercial (Instex, en sus siglas en inglés), un sistema diseñado para poder mantener las relaciones comerciales con Irán, que fue «un paso adelante, pero insuficiente», como adelantó Araqchi. El ministro de Exteriores, Javad Zarif, recordó entonces que «los europeos se comprometieron a garantizar la venta del petróleo de Irán, y no lo hicieron; Los europeos se comprometieron a garantizar el transporte, que tampoco cumplieron, también se comprometieron a garantizar el retorno de los activos iraníes y tampoco cumplieron».
El anuncio de la república islámica fue calificado de «violación» del acuerdo por parte de Emmanuel Macron, quien telefoneó a Rohaní para «intentar explorar antes del 15 de julio medidas que resuciten el diálogo entre todas las partes». Alemania se mostró «extremadamente preocupada» ante el nuevo escenario y el Reino Unido urgió a los iraníes a «volver a ser fiel a los compromisos». Pero desde Irán lo que esperan son hechos en forma de medidas contra las sanciones de Trump, no palabras.
Desde Oriente Medio la reacción más contundente fue la de Israel cuyo primer ministro, Benjamín Netanyahu, consideró el anuncio como «un paso muy, muy peligroso» porque acerca a los iraníes a la bomba atómica.
Irán avanza en su presión a Europa, pero Bruselas se muestra impotente y atrapada entre Teherán y Washington. La crisis nuclear viene de la mano del aumento de tensión entre iraníes y estadounidenses, pulso que se ha extendido hasta Gibraltar.
Por su parte, desde el Kremlin expresaron este lunes su preocupación por la situación en torno al pacto nuclear con Irán e insisten en la necesidad de proseguir con el cumplimiento de lo acordado pese a todo. «La situación, naturalmente, es preocupante. Rusia tiene pensado continuar con el diálogo y los esfuerzos diplomáticos.», dijo a la prensa el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
El representante del Kremlin subrayó que el presidente ruso, Vladímir Putin, había advertido sobre las «consecuencias negativas» que acarrearía el abandono del acuerdo por uno de los signatarios. «Lamentablemente, ahora nos toca constatar estas consecuencias», afirmó. Asimismo, agregó que Moscú se encuentra ahora a la espera de los resultados de un informe de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) sobre Irán que se conocerán en breve.