Los nacionalistas escoceses advierten que la salida de la UE abrirá una crisis constitucional
24 ene 2020 . Actualizado a las 08:43 h.El brexit ya es imparable. La reina Isabel II refrendó este jueves la ley aprobada ayer por el Parlamento británico y la cual contiene el acuerdo de salida de la Unión Europea que Londres y Bruselas pactaron en octubre. «Debo informar a esta Cámara (…) que su majestad la reina ha dado el su consentimiento a la ley del acuerdo de retirada», anunció el vicepresidente de la Cámara de los Comunes, Nigel Evans, en medio de ovaciones de parte de los diputados tories.
Pero no todo fueron vítores. Así Ian Blackford, portavoz de los nacionalistas escoceses, advirtió que la ratificación del pacto abrirá una crisis constitucional. «Nos enfrentamos a una situación sin precedentes, cuando los Parlamentos de Edimburgo, Belfast y Cardiff no han dado su consentimiento para esta ley. Y esto contraviene por completo el acuerdo que dejó en claro que el consentimiento de las administraciones delegadas (de las naciones que forman el Reino Unido) tenía que darse a los proyectos de ley para convertirse en actos parlamentarios», dijo.
Con la firma de la monarca concluye un largo y tortuoso proceso legislativo iniciado en el 2018, cuando el Parlamento recibió el primer acuerdo alcanzado por la anterior premier, Theresa May, que terminó naufragando y constándole el cargo. En el 2019, los legisladores recibieron el que Boris Johnson consiguió y que tampoco salió adelante, por lo cual forzó nuevas elecciones.
Primer paso de Bruselas
La comisión de asuntos constitucionales de la Eurocámara ha cumplido este jueves el primer paso para la ratificación europea del acuerdo de salida, al dar su visto bueno a las condiciones del divorcio y recomendar al pleno de la Eurocámara que dé luz verde el próximo día 29 enero, a solo dos días de que se produzca el brexit.
El Gobierno británico espera que el presidente de la Comisión Europea rubrique el tratado el viernes en Bruselas y que Johnson lo haga «en los próximos días».
El 1 de febrero se iniciará un periodo de transición hasta el 31 de diciembre del 2020, en el que el Reino Unido continuará ligado a las estructuras comunitarias y a las normas de la UE mientras negocia un nuevo pacto comercial bilateral.