Una senadora republicana anuncia que votará a favor de la moción para citar testigos en el «impeachment»
INTERNACIONAL
Susan Collins no es la única que podría inclinar la balanza a favor de los demócratas y contra Trump
31 ene 2020 . Actualizado a las 07:52 h.La senadora republicana Susan Collins ha anunciado este jueves su intención de votar a favor de la moción para citar testigos y aportar documentos en el juicio político («impeachment») contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mientras que otro de los senadores que podría inclinar la balanza a favor de los demócratas, Lamar Alexander, ha comunicado que votará en contra.
«Creo que escuchar a ciertos testigos daría a cada parte la oportunidad de presentar su caso de manera más completa y justa, resolver cualquier ambigüedad y proporcionar claridad adicional», ha explicado Collins en un comunicado hecho público al término de la sesión del juicio político de este jueves, donde los senadores han formulado sus preguntas por segundo día consecutivo tanto a los congresistas demócratas que ejercen la acusación de la Cámara de Representantes como al equipo legal de Trump.
«Por lo tanto, votaré en apoyo de la moción para permitir que se citen testigos y documentos», ha agregado la senadora por Maine. Asimismo, ha especificado que considera que la manera más «sensata» de proceder con el asunto de los testigos es que cada parte acuerde un número igual de testigos para que presten declaración.
«Si se aprueba esta moción, creo que la forma más sensata de proceder sería que los congresistas demócratas y los abogados del presidente intenten acordar un número limitado e igual de testigos para cada lado», ha señalado. «Si no pueden ponerse de acuerdo, entonces el Senado podría elegir el número de testigos», ha añadido.
Jay Sekulow, el abogado de la Casa Blanca y abogado personal de Trump, ya avisó este miércoles de que el proceso continuará durante «meses» si se cita a testigos a declarar, en parte porque el equipo legal del mandatario citará a «cualquiera» que consideren.
Por otra parte, el senador Alexander ha justificado su voto negativo en la votación explicando que «no hay necesidad de más evidencias para probar algo que ya ha sido probado». «Trabajé con otros senadores para asegurarme de que tenemos el derecho de pedir más documentos y testigos, pero no hay necesidad de más evidencias para probar algo que ya ha sido probado y que no cumple con el alto estándar de la Constitución de Estados Unidos para una ofensa objeto de un 'impeachment'», ha precisado el senador por Tennessee en un comunicado.
Al menos 51 senadores, una mayoría simple, deben votar a favor de citar testigos y aportar documentos este viernes. Por lo tanto, cuatro senadores republicanos tendrían que unirse a los 47 demócratas para que la moción fuera aprobada.
Los otros dos senadores republicanos que habían manifestado la posibilidad de votar con los demócratas a favor de la moción, Mitt Romney, muy crítico con Trump, y Lisa Murkowski, aún no se han pronunciado sobre el sentido de su voto. Sin embargo, con la negativa de Alexander, los republicanos vuelven a tener ventaja en el Senado.
La posibilidad de citar a Bolton
Un supuesto borrador de un libro del exasesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos John Bolton asegura que Trump dijo a Bolton en agosto que quería seguir bloqueando la entrega de los 391 millones de dólares de ayuda militar a Ucrania hasta que las autoridades de Kiev se comprometieran a investigar al exvicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, y a su hijo Hunter. El pliego de cargos del juicio político a Trump contiene los delitos de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
El manuscrito de Bolton ha agudizado las grietas en la mayoría republicana. Los republicanos han hecho valer su mayoría en la Cámara Alta hasta ahora para controlar los tiempos y el formato del proceso. Los demócratas han intentado en vano llamar a testigos clave, entre ellos el propio Bolton, para determinar si el presidente abusó de su poder.
El caso contra Trump
El juicio político está presidido por el presidente del Tribunal Supremo de Estados Unidos, John Roberts, y los siete diputados designados por la Cámara de Representantes ejercerán de fiscales de un proceso en el que todos los senadores deben actuar como jurado, independientemente del partido en el que militen.
El proceso de impeachment abarca la investigación y votación en la Cámara de Representantes, donde Trump fue oficialmente reprobado en diciembre, convirtiéndose así en el tercer mandatario estadounidense censurado, y el juicio político en la Cámara Alta, en el que, hasta la fecha, ningún mandatario ha llegado a ser destituido.
El proceso comenzó a raíz de una denuncia presentada por un oficial de Inteligencia que consideró que la llamada que realizó Trump a su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, el 25 de julio fue un intento de presionarle para obligarle a abrir una investigación sobre los Biden, paralizando hasta entonces la entrega de más de 300 millones de dólares de ayuda militar a Kiev y aplazando la invitación para una reunión en la Casa Blanca.
Trump mantiene que es víctima de una «caza de brujas» y que su llamada fue «perfecta», a pesar de las contradicciones que se han observado en el Gobierno desde la denuncia del funcionario anónimo por la supuesta campaña de presión a Ucrania.