Bolsonaro desata las críticas en Brasil por promover protestas contra el Congreso y el Senado

Héctor Estepa
héctor estepa BOGOTÁ / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

ADRIANO MACHADO | Reuters

Alega que lo hizo a través de su WhatsApp de uso personal

29 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Jair Bolsonaro protagoniza un nuevo escándalo. El presidente brasileño compartió a principios de semana, en su WhatsApp personal, un vídeo que insta a participar en una manifestación contra el Congreso y el Tribunal Supremo. El martes de Carnaval se le atragantó a muchos cuando conocieron la noticia. Esa protesta, convocada por sectores derechistas afines al Gobierno y fijada para el 15 de marzo, es considerada por la oposición como una amenaza para la democracia.

La manifestación fue organizada después de que el general retirado Augusto Heleno Ribeiro, ministro de Seguridad Institucional, criticase al Legislativo por bloquear las acciones del Ejecutivo. «No nos dejemos chantajear por el Congreso. Que se joda», expresó el militar a mediados de este mes.

En el vídeo, aderezado con una épica versión del himno brasileño, aparecen imágenes de Bolsonaro levantando banderas nacionales, además de otras de su convalecencia en el hospital, en el año 2018, tras haber sufrido un ataque con cuchillo al inicio de su campaña electoral.

La explicación del presidente

«Bolsonaro y el general Heleno están provocando manifestaciones contra la democracia, la Constitución y las instituciones, en otro gesto autoritario de quien agrede la libertad y los derechos todos los días», escribió el expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva en las redes sociales.

Bolsonaro respondió ayer a todas las críticas: recalcó que respeta la división de poderes, llamó a funcionarios a no participar en la marcha y criticó a los «medios podridos» por querer «envenenar» a la ciudadanía. «Mi WhatsApp es de uso personal. Cualquier especulación fuera de ese contexto son intentos rastreros de hacer tumultos en la República», dijo el líder brasileño.

Como suele ocurrir, Bolsonaro habla por un lado y sus familiares por otro. «¿Si cayera una bomba de hidrógeno sobre el Congreso, usted cree realmente que el pueblo brasileño lloraría?», se preguntó en Twitter el diputado Eduardo Bolsonaro, tercer hijo del presidente, subiendo aun más la apuesta.

La actitud del presidente ha sido fuertemente criticada por varios estamentos. Rodrigo Maia, presidente de la Cámara Baja, ha reclamado respeto institucional. «Jair Bolsonaro no está a la altura del altísimo cargo que ejerce», expresó, por su parte, Celso De Mello, un magistrado del Tribunal Supremo de Brasil.

La Orden de Abogados de Brasil, que espoleó el impeachment contra la expresidenta izquierdista Dilma Roussef, ha llegado a apuntar que existen bases para realizar un juicio político contra el mandatario. Al menos un diputado ha dicho ya estar dispuesto a denunciarlo.