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El puerto de Róterdam sobrevive sin sobresaltos al primer día laboral tras el «brexit»

Imane Rachidi RÓTERDAM | EFE

INTERNACIONAL

BART BIESEMANS | Reuters

El mayor embarcadero de Europa supera su primera prueba de fuego

04 ene 2021 . Actualizado a las 20:28 h.

El puerto de Róterdam (Países Bajos) sobrevivió este lunes sin sobresaltos al primer día laborable del 2021, en el que el transporte marítimo y los flujos comerciales entre el Reino Unido y la Unión Europea (UE) están sometidos a las nuevas reglas del brexit, con un aumento de controles aduaneros y una licencia de exportación.

Transbordadores llenos que ponían rumbo al Mar del Norte, camioneros con rostro de desazón que eran redirigidos hacia los aparcamientos temporales para poner al día su documentación y registrar su mercancía antes de recibir autorización para acceder a la terminal, agentes de aduanas y veterinarios movilizados pero, sobre todo, muchos nervios por miedo a que algo se tuerza y la circulación se vea bloqueada por los atascos.

Para evitar la congestión, los agentes del puerto han separado de forma clara a los exportadores que ya tienen todos sus papeles en orden de aquellos que han obviado las advertencias y no habían registrado su mercancía, por lo que tienen que pasar por los equipos de escaneo, recibir explicaciones del procedimiento y empezar a acostumbrarse a la nueva situación del comercio de mercancías con los británicos.

«El día ha ido bastante bien. Hubo dos viajes que estaban muy llenos y afortunadamente rechazamos muy pocos camiones que no tenían sus documentos completos, aunque todos ellos han podido corregir las formalidades muy rápido y subirse a un barco a tiempo», aseguró a Efe Leon Willems, portavoz de la Autoridad Portuaria de Róterdam.

Ha sido una jornada en la que el puerto de Róterdam, el mayor embarcadero de Europa, ha puesto a prueba todos los preparativos que organizó durante los últimos tres años: fue el primer día del año en el que el puerto volvió a funcionar a capacidad normal, con unos 300 camiones por ferri, y con un flujo habitual de transporte marítimo con Reino Unido y el resto del mundo.

La Aduana neerlandesa, que reclutó a 900 empleados nuevos para hacer frente al trabajo adicional, ya había advertido sobre la presión que supondrá el brexit para la exportación e importación de productos, incluso después de que Bruselas y Londres hayan alcanzado un acuerdo comercial poco antes de Navidad, porque se necesitará una licencia oficial que los transportistas deben solicitar con antelación antes de ir al puerto.

Años de preparación

Para sectores específicos, como productos agrícolas, medicinas y productos químicos, se tendrán en cuenta disposiciones adicionales con respecto a los certificados de exportaciones e importación, aunque las etiquetas que deben usarse en los productos estén cubiertas por las disposiciones que las hacen libres de aranceles.

Pero los pocos problemas que hubo se resolvieron rápidamente porque el embarcadero se ha estado preparando a fondo durante los últimos tres años, con la base de datos PortBase como medida estrella, una plataforma digital que adapta todos los sistemas en los que se puede registrar la carga por adelantado, lo que facilita preparar el viaje.

Las verificaciones de documentación, que ya se aplican al comercio hacia y desde otros países no comunitarios, se han intensificado también hacia el Reino Unido. Unos 3.000 camiones y remolques cruzan cada día este puerto hacia territorio británico.

La asociación de importadores y exportadores Evofenedez pidió ayer no bajar la guardia, en especial por las restricciones del covid-19, pero sobre todo porque «muchos empresarios holandeses se han preparado acumulando existencias sustanciales en noviembre y diciembre».