Scholz no cierra aún su Gobierno, a la espera de cuadrar las cifras de paridad
INTERNACIONAL
El Ministerio de Sanidad es el gran dilema para el futuro canciller alemán, que este miércoles afronta su investidura
03 dic 2021 . Actualizado a las 20:02 h.El socialdemócrata Olaf Scholz entra este sábado en la recta final de su investidura como canciller, que se completará el próximo miércoles, con la prevista ratificación del pacto de coalición por parte de su partido y de sus futuros socios, verdes y liberales, y la incógnita todavía pendiente de quién asumirá la cartera de Sanidad.
Al Partido Socialdemócrata (SPD) le corresponde el primer turno para dar el visto bueno al acuerdo. Lo hará en un congreso con voto telemático este sábado. Le seguirá, el domingo, el FDP, en un formato similar, tras lo cual, el lunes, los Verdes comunicarán el resultado de la consulta entre sus 125.000 militantes.
La ratificación de los tres socios, que formarán una alianza inédita en el Gobierno federal alemán, es el penúltimo capítulo en el relevo en el poder. Este se materializará con la sesión de investidura, prevista para el miércoles, en el Bundestag (Parlamento), donde el tripartito suma 416 del total de 736 escaños.
El reparto de ministerios se conoce: seis para el SPD, cinco para los Verdes —entre ellos, el superministerio de Economía y Clima, para Habeck, además del de Asuntos Exteriores, para Baerbock—, y cuatro para el FDP, entre los que destaca el de Finanzas, para Lindner, defensor del techo de deuda.
Los liberales nunca favorecieron la cuota femenina: están en la franja baja en cuanto a representación de mujeres en el Bundestag, con un 23,9 % de escaños ocupados por diputadas (el furgón de cola lo ocupa la ultraderechista Alternativa para Alemania, con un 13 % de parlamentarias). Y en la asignación de sus carteras tampoco buscaron la paridad. Tres de sus cuatro ministerios estarán ocupados por hombres (Finanzas, Justicia y Transportes).
Los Verdes, partido con la máxima cuota de escaños femeninos, un 59 %, compensó algo ese desequilibrio al asignar tres de sus cinco carteras a mujeres: Exteriores, Medio Ambiente y el Ministerio de la Mujer, Familia y Juventud.
Pero ni así evita Scholz el que probablemente sea el mayor dilema ante la formación de su equipo. Su puesto como jefe de Gobierno obviamente no está en discusión. Tampoco hay dudas respecto al del ministro adscrito a la Cancillería, un cargo adicional a los seis que les corresponden, que será para Wolfgang Schmidt, persona de confianza desde que era alcalde-gobernador de Hamburgo, antes de convertirse en vicecanciller de Merkel.
Se da por hecho, asimismo, que seguirá al frente de Trabajo y Asuntos Sociales Hubertus Heil, puntal de los logros de sello socialdemócrata en la pasada legislatura y también del objetivo, incluido en el pacto de coalición, de subir el salario mínimo de sus 9,5 euros actuales a 12.
La última incógnita
Si aspira a la paridad en el Gabinete, a Scholz no le queda margen en lo que respecta al Ministerio de Sanidad. Para muchos compatriotas, la persona ideal es Karl Lauterbach, experto en la materia y omnipresente en los medios desde que estalló la pandemia. Cada uno de sus pronósticos, advertencias y recomendaciones sobre las pautas a seguir se ha cumplido. Defiende la máxima cautela, en línea con lo que ha sido la gestión de Merkel.
Los verdes y los liberales anunciaron sus ministros tras presentar el pacto. Scholz, quien ya ha asignado al general Carsten Breuer la jefatura del equipo de crisis contra el covid, se guarda su lista de carteras y no la dará a conocer, según ha explicado, hasta la semana próxima.