Condenan a 18 años de prisión al marido de la líder opositora de Bielorrusia

Rafael M. Mañueco MOSCÚ / COLPISA

INTERNACIONAL

La líder opositora bielorrusa, SvetlanaTijanóvskaya, se exilio en Lituania.
La líder opositora bielorrusa, SvetlanaTijanóvskaya, se exilio en Lituania. DPA vía Europa Press

El tribunal declara culpable a Serguéi Tijanovski, detenido desde mayo del 2020, de «organizar disturbios masivos».

14 dic 2021 . Actualizado a las 17:24 h.

La Justicia bielorrusa, completamente supeditada a los caprichos del dictador Alexánder Lukashenko, condenó este martes a Serguéi Tijanovski, marido de la líder opositora Svetlana Tijanóvskaya, a 18 años de prisión en régimen severo. El tribunal le declara culpable de «organizar disturbios masivos». Su esposa, que según todos los indicios ganó las elecciones presidenciales de agosto del 2020, se encuentra exiliada en Lituania.

Tijanovski pretendía ser uno de los candidatos para disputar a Lukashenko la presidencia, pero fue detenido en mayo, tres meses antes de los comicios, con el objetivo de impedir que entrara en liza. No fue el único contendiente de peso que el tirano se quitó de en medio: Víctor Babariko fue a parar a la cárcel y Valeri Tsepkalo fue vetado por la Comisión Electoral Central, pero logró salir a tiempo del país con su familia.

Ante tal panorama, Tijanóvskaya decidió ser ella quien concurriese a las elecciones y formó un tándem con Verónica, la esposa de Tsepkalo, y María Kolésnikova, la asistente de Babariko. Las tres trabajaron juntas durante la campaña electoral y, según la oposición y observadores extranjeros, fue Tijanóvskaya quien se alzó con la victoria en la votación del 9 de agosto del 2020.

Pero la Comisión Electoral, manejada también por Lukashenko, decidió que fue él el ganador. El evidente fraude hizo que miles de personas salieran a la calle durante varios meses exigiendo la dimisión del déspota manipulador y el reconocimiento de Tijanóvskaya como la verdadera jefa del Estado. La respuesta fue una ola de represión sin precedentes y centenares de personas encarceladas. La sentencia de hoy contra Tijanovski no es más que la continuación de esa misma tendencia.