La desbandada de los inversores tratando de poner su dinero a cubierto dejó pérdidas de hasta el 5 % en los índices europeos en los peores momentos del día, y disparó el petróleo por encima de los cien dólares
24 feb 2022 . Actualizado a las 18:51 h.No creían los analistas que Vladimir Putin fuese a llegar tan lejos. Andaban operadores y mercados manejándose en un escenario intermedio: tensión, sí; preocupación, mucha; invasión total, poco probable. Pero resulta que Putin ha cruzado esa línea que no pensaban que cruzaría; y ahora, cada paso que da supone uno más hacia el peor de los escenarios.
Los últimos movimientos de las cotizaciones evidenciaban la esperanza de que Rusia se conformaría con la anexión de las dos provincias del este de Ucrania sobre las que declaró la independencia. Ni inversores, ni analistas manejaban como escenario base una invasión total del país. No creían que se arriesgara a tanto ante la magnitud de las sanciones que se avecinan. Pero, lo ha hecho.
De ahí la desbandada general que esta mañana han sufrido los mercados, con el dinero tratando de ponerse a cubierto a toda prisa de la ofensiva. El resultado: un diluvio de ventas que ha hundido las bolsas y ha disparado el petróleo por encima de los 100 dólares por barril, niveles que no se veían desde el 2014.
No es ningún secreto que la inversión huye de la incertidumbre como alma que lleva el diablo. Es uno de sus peores enemigos. Y a estas horas pocas son las certezas que hay sobre las mesas de operaciones. Nadie sabe lo que pasará en los próximos días, ni tan siquiera en las próximos horas. Y el dinero no arriesga.
Así que la huida está siendo general. Las primeras en sufrir sus consecuencias fueron las bolsas asiáticas, menos próximas al conflicto y, precisamente por ello, con caídas aún contenidas, próximas al 2 %.
En Europa, más afectada directamente por la ofensiva de Rusia, la herida ha sido mucho más profunda, con descensos que en los peores momentos del día rozaron y hasta superaron el 5 %. El Ibex 35 inició la sesión con descalabros del 4,3%, que al cierre se redujeron al 2,86 %, con Santander y Sabadell como los valores más castigados (perdieron más del 7 %). También superaba el 4 % el desplome inicial del Dax, el principal indicador de la Bolsa de Fráncfort, que acabó con un descenso del 3,96 %. No en vano Alemania es el país más afectado por el conflicto. Ya no solo por su cercanía con la zona del conflicto, sino, sobre todo, por las implicaciones económicas que la crisis puede tener para la economía germana, el mayor socio comercial europeo de Rusia.
Mucho peor le iban las cosas a la Bolsa de Moscú, que llegaba a perder más del 40 %, con el rublo en mínimos históricos frente al dólar.
Parte del dinero que huye a toda prisa de las bolsas se está refugiando en el mercado del petróleo contribuyendo a disparar la cotización del barril. Aunque, claro está, lo que más está tensionando los precios es la posibilidad de que la crisis ponga en riesgo las exportaciones rusas de oro negro. No es para menos, se trata del segundo mayor productor del mundo.
La onda expansiva del ataque ruso sobre Ucrania también llega al mercado de divisas, con el euro como gran damnificado y el dólar ganando terreno a marchas forzadas. A última hora de la tarde, la divisa europea se pagaba a 1,114 dólares.