Francia se aferra al europeísmo de Macron

Luís Pousa Rodríguez
Luís Pousa REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

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La UE celebra la reelección del presidente galo, que se impone a la ultraderechista Le Pen con un 58,54% de los votos

25 abr 2022 . Actualizado a las 17:37 h.

Durante dos semanas, desde que el pasado 10 de abril el liberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen pasaron a la segunda vuelta de las presidenciales francesas, Occidente había contenido la respiración. Los precedentes rupturistas del brexit y de Donald Trump hacían temer que lo imprevisible se hiciese realidad de nuevo en el corazón de Europa. Pero, en esta ocasión, el guion se ciñó a lo que auguraban las encuestas, y Macron fue reelegido este domingo presidente de Francia con un amplio margen del 58,54 % de los votos frente al 41,46 % de apoyos que sumó Le Pen. Con su reelección, pero sobre todo con la derrota en las urnas de la líder de la extrema derecha gala, un soplo de alivio recorrió esta noche Francia, la Unión Europea y la OTAN, que veían en la llegada al Elíseo de la dirigente ultra —con un amplio historial de coqueteos ideológicos y financieros con la Rusia de Vladimir Putin— una grave amenaza a la existencia misma de la UE y de la Alianza Atlántica en medio del desafío a las democracias occidentales que representa la invasión rusa de Ucrania.

Al pie de la Torre Eiffel

Dada la trascendencia del resultado, Macron y los suyos festejaron la victoria en un escenario plagado de símbolos históricos y patrióticos: el Campo de Marte de París. La gran explanada que se extiende al pie de la Torre Eiffel acogió esta noche a miles de votantes de La República en Marcha.

Consciente de que tiene por delante cinco años sembrados de dificultades y de que los dos extremos del arco ideológico han tensionado la política francesa hasta provocar profundas fracturas en la sociedad, Macron inició su intervención prometiendo restañar las heridas, «ser el presidente de todos» y «escuchar el silencio» de quienes este domingo optaron por la abstención. El jefe de Estado incluso se mostró dispuesto a atender la «cólera» que, a su juicio, late detrás del amplio voto a la ultraderechista Marine Le Pen.

El reelegido presidente quiso recordar, a la hora de la victoria, los momentos «dolorosos» y «difíciles» de un mandato de «transformación» en el que ha tenido que hacer frente a las protestas masivas contra sus reformas, a la pandemia del covid y, desde finales de febrero, al desafío de Putin a Occidente.

«Tenemos mucho que hacer. La guerra en Ucrania está ahí para recordarnos que atravesamos tiempos trágicos en los que Francia debe mostrar la claridad de su voz y desarrollar su fuerza en todos los ámbitos», recalcó Macron, que insistió en que los próximos cinco años no serán de «continuidad», sino que ampliará y reformará sus propuestas.

Bruselas, la primera en sonreír

Tal era la sensación de victoria en Bruselas que los máximos dirigentes de la Unión ni siquiera aguardaron al escrutinio oficial para felicitar al vencedor, el europeísta militante Emmanuel Macron. A los pocos minutos de hacerse públicas las primeras proyecciones de las encuestas a pie de urna, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, celebraron el triunfo del liberal en Twitter y subrayaron la «excelente cooperación» de la Francia de Macron con la UE. «Juntos, haremos avanzar a Francia y a Europa», tuiteó Von der Leyen, mientras que Michel subrayó en su mensaje la trascendencia del triunfo en un momento histórico en el que la guerra vuelve a sacudir el suelo europeo: «En estos tiempos convulsos, necesitamos una Europa sólida y una Francia totalmente comprometida con una Unión Europea más soberana y más estratégica. Podemos contar con Francia cinco años más».

Marine Le Pen.
Marine Le Pen. YVES HERMAN | REUTERS

Tampoco aguardó al recuento Marine Le Pen para salir a escena. La ultraderechista admitió su nuevo fracaso pasadas las ocho de la tarde, cuando solo se manejaban estimaciones a partir de los sondeos. La líder de Agrupación Nacional presumió del «histórico» resultado de su partido, que a su juicio anticipa «un gran cambio» en el país en la «gran batalla electoral» de las elecciones legislativas de junio.

Crecimiento de la ultraderecha

Le Pen calificó su derrota como «una gran victoria» y destacó que «millones de compatriotas han apostado por el cambio». Con más del 40 % de los votos en sus manos, la dirigente que se presentó en la campaña como una «mujer de Estado» ha cosechado el mejor resultado de la ultraderecha en la historia de Francia, justo 20 años después de que su padre disputase a Jacques Chirac la segunda vuelta de las presidenciales. El anterior récord de votos del flanco más a la derecha del espectro ideológico francés también lo ostentaba Marine Le Pen. En el 2017 había logrado el 34 % de las papeletas, prácticamente la mitad que Macron (con un 66 % de los sufragios), por lo que en cinco años ha consolidado su espacio electoral con un crecimiento de más del 7 % de sus apoyos.

Aunque se apresuró a felicitar al reelegido jefe de Estado, Le Pen no ahorró críticas a Macron, al que acusó de utilizar «métodos desleales» para ganar los comicios y al que se comprometió a hacer frente con una «verdadera oposición». «Sabemos que ningún patriota puede aceptar que Macron esté presente de forma destructiva», arremetió la dirigente de Agrupación Nacional.

La abstención, una de las claves

La elevada abstención fue una de las claves de la jornada. Un 28,2 % de los franceses decidieron no acudir a las urnas, lo que, según los analistas, habría perjudicado a la líder de la extrema derecha gala, que necesitaba una participación alta y una gran movilización de sus simpatizantes para hacer frente al candidato a la reelección. La abstención de este domingo fue la más elevada desde los comicios de 1969, cuando había alcanzado el 31,1 %.

Otras reacciones

El líder de la izquierda radical en Francia, Jean-Luc Mélenchon, tachó a Emmanuel Macron de ser el presidente de la V República «peor elegido» por los altos niveles de abstención, que superan el 28 %. «Macron es el presidente peor elegido de la V República. Nada en un océano de abstención, voto blanco y nulo», reaccionó Mélenchon minutos después de conocer las primeras estimaciones de voto, que dan al candidato liberal en torno al 58 % de los votos.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha valorado la reelección de Macron, al asegurar que con su triunfo en la segunda vuelta de las elecciones francesas «gana la democracia. Gana Europa». Lo ha hecho a través de su cuenta de Twitter, en la que ha destacado que «los ciudadanos han elegido una Francia comprometida con una UE libre, fuerte y justa».

La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, candidata del Partido Socialista a la Presidencia de Francia en la primera vuelta electoral, ha extendido sus «felicitaciones republicanas» a Emmanuel Macron por su victoria, pero ha llamado a «reconstruir una nueva izquierda» para tener opciones en futuras citas.

Le Pen se impone en los territorios de ultramar

La candidata ultraderechista aventaja a Macron en la mayoría de los territorios franceses de ultramar, que votaron el sábado debido a la diferencia horaria en unos resultados publicados por la prensa el domingo. En Guadalupe, donde la participación ha sido de un 47,18 %, Le Pen logró un 69,6 % de los votos frente al 30,4 % de Macron, mientras que tanto en Martinica (participación del 45,45 %) como en la Guyana Francesa la líder de la Agrupación Nacional se llevó en torno a un 61 % de los votos frente al 39 % de Macron.

Le Pen se hizo también con un 55,52 % de los votos en San Bartolomé y San Martín y con un 50,69 % en San Pedro y Miquelón, mientras que en la Polinesia francesa los votantes optaron por Macron con un 51,81 % de los votos. Los franceses residentes en estos territorios votan un día antes que los de la metrópoli desde el 2007, para evitar que depositen sus papeletas conociendo ya el resultado de la mayoría de sus conciudadanos, lo que puede favorecer la abstención.

Macron ganó en el 2017 en estos territorios, que en la primera vuelta de estas presidenciales apoyaron mayoritariamente al candidato izquierdista que quedó fuera de la segunda ronda, Jean-Luc Mélenchon. Sin embargo, el actual presidente ha sido el preferido de la amplia mayoría de los franceses que residen en territorios americanos, como en Argentina (donde Macron se llevó un 89 % de los votos), Brasil (86 %), Chile (87 %), Canadá (86 %, sin Vancouver) y Estados Unidos (92 % sin Chicago ni Nueva Orleans).