Un despiste de Daniel Sancho, clave en la investigación

La Voz AGENCIAS

INTERNACIONAL

Daniel Sancho escoltado por las autoridades tailandesas a su salida de la comisaría de policía de Koh Phangan
Daniel Sancho escoltado por las autoridades tailandesas a su salida de la comisaría de policía de Koh Phangan SOMKEAT RUKSAMAN | EFE

El joven olvidó en un restaurante una mochila con un cuchillo y una gasa con sangre

31 ago 2023 . Actualizado a las 08:44 h.

Casi un mes después del asesinato de Edwin Arrieta, las incógnitas que rodean el caso no paran de crecer. Una de las que más llaman la atención es la rapidez con la que han actuado las autoridades tailandesas. Ahora, se han conocido una serie de detalles que serían los causantes de la aceleración de las pesquisas. Cabe recordar que la policía del país continúa buscando los restos del cuerpo de Edwin Arrieta en el mar, donde el español señaló haberlos arrojado. Buscan principalmente el torso, para tratar de descartar el apuñalamiento. Por ahora, la principal hipótesis de los forenses es que el cirujano murió por la propia acción de desmembramiento tras darse un fuerte golpe en la cabeza.

Daniel Sancho quiso aparentar total normalidad tras el crimen, sin embargo, hubo un detalle que se le pasó por alto y que ahora medios de comunicación han desvelado. Al día siguiente de los hechos, acudió a un restaurante de la zona para desayunar. El joven, en su intento de no levantar sospechas, grabó un vídeo del momento que después subió a las redes. Uno de los comensales se percató de que el chef tenía «su mano derecha vendada y estaba sangrando» y él mismo aseguró que se había cortado pelando un coco. El hijo de Rodolfo Sancho, presumiblemente preso de los nervios, abandonó el restaurante olvidando una mochila que contenía un cuchillo, una gasa y restos de sangre.

Paralelamente a estos hechos, los investigadores hallaban en un vertedero cercano los restos de Edwin y un recibo que indicaba el lugar en el que habían sido compradas las herramientas usadas posteriormente para descuartizar el cuerpo. Revisando las cámaras de seguridad de la zona rastrearon la moto alquilada por Sancho y lograron identificarle. Al revisar sus redes sociales, vieron el vídeo publicado por él mismo y acudieron al restaurante, donde encontraron la mochila. 

A punto de cumplirse un mes desde el asesinato de Arrieta el 2 de agosto en la isla de Phangan, al sur de Tailandia, la Policía continúa trabajando en el informe de la investigación que tendrá que presentar a la Fiscalía de la vecina Koh Samui, donde se encuentra Sancho en prisión provisional. La Fiscalía confirmó este miércoles que todavía no lo ha recibido y aseguró que no designará el equipo encargado del caso hasta que no haya finalizado la investigación policial.

La investigación policial, a su ritmo

Así, aunque la Policía haya avanzado el cierre de la investigación y compartido detalles de la misma, el trabajo de compilación y análisis de las pruebas continúa en marcha de forma más discreta y en el marco de un procedimiento más complejo que el transmitido públicamente, con unas 30 personas involucradas, entre agentes, investigadores, médicos forenses y buzos.

Entre las pruebas de la Policía hay prendas de ropa, ocho partes humanas, así como bolsas de plástico de color negro y verde donde se encontraron restos humanos, enviadas para analizar al Instituto de Medicina Forense de Bangkok, entre otros centros especializados.

Un proceso arduo que puede retrasarse, también debido a que se tuvieron que enviar muestras de ADN de familiares de Arrieta desde Colombia para el cotejo genético.

Este escrito policial también recoge la existencia de 20 testigos, mientras entre las pruebas incriminatorias contra Sancho se hallarían imágenes de CCTV que muestran al joven comprando cuchillos y bolsas de basura negras y verdes en una tienda de Koh Phangan el 1 de agosto, un día antes del asesinato y descuartizamiento.

De este modo, pese a los retales del proceso compartidos por la Policía, fuentes próximas al caso indican que el informe final, que se entregará a la Fiscalía y recibirán después los abogados de Sancho, puede contener información novedosa.

Además, la investigación podría incluso continuar cuando el informe sea entregado y si no se ha agotado el plazo de 84 días, pues la Fiscalía dispondría del período restante para solicitar más pruebas si así lo conviene.

Por el momento, los abogados de Sancho, contratados por la familia del joven de 29 años a través de un despacho con sede en Bangkok, preparan la defensa, que solo se puede ejercer en el proceso judicial mediante un letrado tailandés.