Los aliados europeos contradicen a Macron y descartan el envío de tropas a Ucrania

Rosa Paíno
R. Paíno REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Filip Singer | EFE

El Kremlin advierte que el despliegue supondría una declaración de guerra, mientras Ucrania da la bienvenida a cualquier debate para ampliar el apoyo

28 feb 2024 . Actualizado a las 09:53 h.

El presidente Emmanuel Macron desató un terremoto político al no excluir el envío de tropas a Ucrania para evitar que Rusia gane la guerra. Una propuesta en la que se quedó solo. No fue secundado ni por la OTAN ni por aliado alguno, y de paso dio argumentos al Kremlin para lanzar la advertencia de que el despliegue de soldados occidentales haría «inevitable» un conflicto directo con la Alianza Atlántica.

En la rueda posterior a la conferencia del lunes en el Elíseo —en la que participaron el alemán Olaf Scholz, Pedro Sánchez, el neerlandés Mark Rutte y el británico David Cameron—, Macron rompió un tabú al anunciar que «no había consenso» sobre el envío de tropas occidentales a Ucrania, pero que «nada debería excluirse» para lograr «la derrota de Rusia».

Un día después, Scholz fue uno de los más tajantes al descartar ese escenario. «No habrá tropas terrestres, ningún soldado, ni de los países europeos ni de la OTAN, en suelo ucraniano», dijo el canciller alemán. El último en contradecir a Macron fue el presidente Joe Biden, mediante un comunicado de la Casa Blanca que descartaba el envío de soldados estadounidenses para repeler al Ejército ruso.

La negativa alemana fue seguida por una larga lista de aliados europeos, entre ellos España. «No estamos de acuerdo y tenemos que concentrarnos, además, en lo urgente, que es acelerar la entrega de material», afirmó la portavoz del Gobierno español, Pilar Alegría. «No deberíamos especular sobre esto», dijo ante la prensa en Praga el primer ministro polaco, Donald Tusk, tras una reunión con su homólogo checo, Petr Fiala.

Hungría, además de descartar el envío de soldados, reiteró su postura de no entregar armas al país atacado por Rusia, mientras Austria criticó a Macron por abrir un debate que «va en la dirección contraria» a los esfuerzos por parar una guerra que cumple ya dos años.

Como no podía ser de otra forma, Ucrania dio la «bienvenida» a cualquier debate para «aumentar, ampliar o cambiar» la ayuda. Para el principal asesor del presidente Zelenski, Mijailo Podoliak, que entre los socios de Kiev se barajen nuevas formas de apoyar la causa ucraniana es una «señal directa» de «los riesgos» que Rusia está asumiendo y que tanto Ucrania como Europa responderán de manera «consecuente».

Y Moscú no desaprovechó la ocasión para lanzar un aviso a navegantes. Según el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, con el envío de tropas «no sería necesario hablar de la probabilidad, sino de la inevitabilidad de un conflicto militar» con los países de la OTAN. Y añadió que los países que decidan seguir el llamamiento de Macron deben «valorar» si el conflicto con Rusia «corresponde a sus intereses y los intereses de sus pueblos». 

Debate interno

Ante la avalancha de críticas tanto de fuera como de dentro de Francia, el jefe de la diplomacia gala, Stéphane Séjourné, matizó ante los diputados que, en ningún caso, se plantean «superar la barrera de la beligerancia, al tiempo que el Elíseo matizó que no se hará nada que incremente la escalada, informa Efe.

«Macron ha superado una barrera suplementaria de beligerancia al hacer que planee un riesgo existencial sobre 70 millones de franceses», aseguró la líder ultraderechista Marine Le Pen en la Asamblea Nacional. Una acusación que respondió el primer ministro Gabriel Attal, que recordó que antes de la invasión de Ucrania Le Pen defendía una alianza militar con Rusia: «Cabe preguntarse si las tropas de Putin no están ya en nuestro país». El líder izquierdista Jean-Luc Mélenchon acusó a Macron de ser un «irresponsable».

Oleg Orlov es esposado tras escuchar la sentencia a dos años y medio.
Oleg Orlov es esposado tras escuchar la sentencia a dos años y medio. SERGEI ILNITSKY | EFE
 

Rusia condena a dos años y medio de cárcel al activista opositor Oleg Orlov 

Rusia intenta de nuevo acallar las críticas a la campaña militar en Ucrania al condenar al veterano activista Oleg Orlov, cofundador de Memorial, organización que recibió el Nobel de la Paz en el 2022 y disuelta por la Justicia rusa. Un tribunal de Moscú le impuso dos años y medio de prisión por atentar «contra los valores patrióticos» por sus reiteradas denuncias de la ofensiva militar de su país en Ucrania.

Cuando el tribunal de Moscú anunció el veredicto, Orlov se giró hacia su esposa, Tatiana, y le recordó su promesa de no llorar. «No me arrepiento de nada», dijo. El fallo se produce apenas unos días después del fallecimiento en prisión de Alexéi Navalni.

Orlov, de 70 años, era uno de los últimos críticos del Kremlin que no estaba en prisión o en el exilio. En su último discurso, denunció «el estrangulamiento de la libertad» en Rusia y «la invasión de Ucrania». También se refirió a la muerte de Navalni en una prisión en el Ártico. «Fue un asesinato», acusó.

En el 2023, la Justicia ya lo había condenado a una multa de 150.000 rublos (unos 1.500 euros), pero la Fiscalía recomendó la repetición del juicio. En este segundo proceso, ha sido sentenciado a permanecer 30 meses entre rejas.