El régimen de Irán recurre a la disuasión nuclear

Mikel Ayestaran ESTAMBUL / COLPISA

INTERNACIONAL

El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, en febrero durante una visita a una base de la Guardia Revolucionaria.
El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, en febrero durante una visita a una base de la Guardia Revolucionaria. Europa Press / Contacto / Iranian Pr | EUROPAPRESS

Washington da luz verde a Tel Aviv para invadir Rafah, a cambio de «contención» en su respuesta contra Teherán

19 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Irán dio este jueves un paso más en su nuevo cambio de estrategia y anunció su intención de revisar «la doctrina nuclear» ante las amenazas de Israel. «Las amenazas del régimen sionista contra las instalaciones nucleares de Irán hacen posible que tengamos que revisar nuestra doctrina nuclear y desviarnos de nuestras consideraciones previas», declaró Ahmad Haghtalab, comandante de la Guardia Revolucionaria a cargo de la seguridad nuclear.

La última palabra en el programa atómico la tiene el líder supremo, Alí Jamenéi, pero es una de las primeras veces que un alto cargo iraní sugiere la posibilidad de hacerse con armamento nuclear. El factor atómico entra en escena y Haghtalab añadió que, en caso de ser agredidos, «las instalaciones nucleares del régimen israelí serán atacadas con armamento avanzado» en el contraataque.

Alí Vaez, responsable de Irán en el centro de estudios estratégicos International Crisis Group, ya alertó hace un mes de que «Teherán puede dar su último impulso para lograr un elemento de disuasión mayor, es decir, armas atómicas. Esto conlleva riesgos, pero puede proporcionarle el tipo de inmunidad que países como Corea del Norte y Rusia han disfrutado al enfrentarse a Occidente. Si Irán decide volverse nuclear, será difícil evitarlo. Su programa nuclear está muy avanzado y ahora bajo supervisión internacional limitada».

Pese a las sospechas occidentales, el régimen siempre ha defendido que su programa tiene fines civiles. En el 2015, bajo el mandato de Barack Obama, Teherán firmó un pacto nuclear para limitar el enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de sanciones. Después llegó la ruptura del acuerdo por parte de Donald Trump, aunque Irán cumplía lo acordado, según todos los informes del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Desde entonces el régimen islamista ha dado pasos que le acercan al porcentaje necesario para lograr el arma atómica, aunque el Gobierno asegura que se revertirán en cuanto EE.UU. vuelva al pacto del 2015 y levante las sanciones.

La represalia de Israel por el inédito ataque iraní del sábado contra su territorio podría tener lugar tras la Pascua judía, según los mandos militares, y entre los objetivos señalados por los medios locales figuran las instalaciones nucleares iraníes. Estados Unidos le pide a Benjamin Netanyahu «contención» para que no escale el conflicto, pero es el primer ministro israelí quien tiene a última palabra.

Netanyahu también está dando los primeros pasos para ocupar Rafah, el último confín de Gaza cuyas tropas no han ocupado. Los civiles siguen saliendo en dirección al centro de la Franja, aunque todavía quedan muchos en la zona, que pronto será campo de batalla.

Acuerdo para el asalto a Rafah

La inminencia queda clara tras el despliegue por sorpresa de dos brigadas de reservistas cerca de la frontera sur, de cara a Rafah, donde las Fuerzas de Defensa calculan que quedan escondidos cuatro batallones de Hamás. Estados Unidos llegó a calificar de «error» esta operación y se mostró dispuesto a retirar su apoyo a Netanyahu. Pero en estos últimos dos días habría dado luz verde a Israel para llevarla a cabo a cambio de que muestre «contención» en su respuesta a la república islámica por el bombardeo del fin de semana.