La OTAN elige a Rutte para liderar la alianza frente a la amenaza de Rusia

Olatz Hernández BRUSELAS / COLPISA

INTERNACIONAL

El líder saliente de la OTAN, Jens Stoltenberg (a la izquierda), con Mark Rutte, en el 2023.
El líder saliente de la OTAN, Jens Stoltenberg (a la izquierda), con Mark Rutte, en el 2023. REMKO DE WAAL | EFE

«Es un creador de consensos», asegura Stoltenberg, su predecesor

26 jun 2024 . Actualizado a las 22:17 h.

Ya es oficial: el primer ministro neerlandés en funciones, Mark Rutte, será el próximo secretario general de la OTAN. Los aliados formalizaron el miércoles su designación para suceder al noruego Jens Stoltenberg y ocupar el cargo de jefe político de la organización a partir del 1 de octubre. El Consejo Atlántico, formado por los embajadores de los países miembros, hizo oficial la elección de Rutte, quien ha sido desde el principio el candidato favorito al cargo.

En un mensaje en sus redes sociales, Stoltenberg felicitó al político neerlandés: «Es un líder fuerte y un creador de consensos. Sé que dejo la OTAN en buenas manos», destacó. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también celebró que el liderazgo y experiencia de Rutte «serán cruciales» ante los desafíos que afronta la Alianza. «Espero trabajar contigo para fortalecer aún más la colaboración entre la UE y la OTAN», añadió. El Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, se sumó a las felicitaciones asegurando que el trabajo conjunto de ambos bloques «es un pilar para la seguridad europea y trasatlántica».

La cumbre de la organización militar, que se celebrará entre el 9 y el 11 de julio en Washington, servirá para escenificar el cambio de liderazgo dentro de la Alianza Atlántica. Sin embargo, Rutte no asumirá el cargo hasta el 1 de octubre, cuando acaba el mandato de Stoltenberg. Tras diez años en el cargo y habiendo enfrentado la guerra en Ucrania, el noruego ha trabajado para fortalecer la OTAN y ha sido uno de los grandes defensores del aumento de gasto de los aliados. Rutte deberá mantener ese mensaje y asegurar el apoyo a largo plazo a Ucrania.

El claro favorito

Aunque no ha sido designado oficialmente hasta ahora, Rutte concurría prácticamente en solitario para el cargo. Tuvo desde el principio el apoyo de Estados Unidos y el Reino Unido; y la semana pasada logró el respaldo de Eslovaquia y Hungría, el país más proclive a ejercer su derecho a veto. Finalmente, Rutte logró sortear su negativa a apoyarle asegurando que respetará que Hungría no participe en el envío de armas a Kiev ni en el entrenamiento de soldados ucranianos. Su único rival, el presidente rumano Klaus Ioannis, se retiró de la carrera por el puesto y anunció que su país apoyaría a Rutte.

El político liberal cuenta con una amplia experiencia tras casi catorce años al frente del Gobierno neerlandés. Su capacidad de generar consensos y talante diplomático serán claves en las negociaciones para reforzar la OTAN y cumplir con los desafíos que afronta la Alianza.

Aumento de inversiones

La era Stoltenberg ha estado caracterizada por el aumento de la contribución militar de los países aliados. Veintitrés de ellos llegarán este año al mínimo del 2 % del PIB de gasto que exigía el noruego, lo que supone una notable mejora respecto al año pasado. España, por su parte, se mantiene a la cola. En términos generales, la Alianza ha duplicado su recaudación este año y al 17,9 % la cantidad de dinero que destina a la defensa. La guerra en Ucrania ha contribuido a impulsar las inversiones en Defensa y también ha provocado la incorporación de dos nuevos miembros: Finlandia y Suecia.

Uno de los desafíos de Rutte será mantener ese esfuerzo y aumentarlo para preparar a la OTAN frente a la amenaza potencial que puede suponer Rusia, sobre todo de cara al reabastecimiento de los arsenales de los aliados. La producción de munición y armamento necesita de un fuerte apoyo. La entrega de ayuda militar a Ucrania también seguirá siendo fundamental. Sin embargo, por el momento, la idea de crear un paquete de ayuda financiera para los próximos cuatro años ha chocado con la negativa de más de un país.