El Nuevo Frente Popular, al borde de la ruptura por la falta de consenso

Asunción Serena PARÍS / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El líder de La Francia Insumisa (LFI), Jean-Luc Mélenchon.
El líder de La Francia Insumisa (LFI), Jean-Luc Mélenchon. Europa Press / Contacto / Telmo Pint | EUROPAPRESS

Mélenchon ataca a sus socios después de que rechazaran a sus candidatos

16 jul 2024 . Actualizado a las 22:36 h.

La Francia Insumisa (LFI) ha decidido retirarse hasta nueva orden de las discusiones sobre la formación de un gobierno del Nuevo Frente Popular (NFP) y achaca a los socialistas el fracaso momentáneo para llegar a un acuerdo.

Tras la disolución de la Asamblea Nacional, socialistas, ecologistas, comunistas e insumisos unieron fuerzas rápidamente para formar la coalición del Nuevo Frente Popular, gracias a la cual han terminado como el primer bloque en la Asamblea tras las elecciones. Pero llevan casi diez días intentando ponerse de acuerdo, sin éxito, para designar a la persona que asumirá las riendas del gobierno en su nombre.

Las negociaciones para encontrar a un primer ministro de izquierdas se confrontan a una situación de bloqueo debido a «la oposición sistemática» del Partido Socialista, según denuncia el coordinador de La Francia Insumisa, Manuel Bompard. Aunque por su parte exigen que el candidato sea alguien que aplique al pie de la letra todo el programa rupturista del NFP, lo que para los socialistas es inviable porque así no podrían encontrar los apoyos que necesitan para gobernar ya que les falta un centenar de diputados para tener mayoría absoluta en la Asamblea.

La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los insumisos son las reticencias de los socialistas para apoyar también una candidatura común para la presidencia de la Asamblea Nacional que será elegida este jueves.

«Basta de manipulaciones», ha dicho su líder, Jean-Luc Mélenchon, en las redes sociales. Exigen «una candidatura única para la presidencia de la Asamblea Nacional» y hasta que ese asunto «no esté resuelto», interrumpen toda negociación.

Además, acusan al primer secretario de los socialistas, Oliver Faure, de oponerse a todas las propuestas que le hacen, después de que el sábado rechazara la candidatura de la presidenta de La Reunión, Huguette Bello, persona cercana a Jean-Luc Mélenchon.

«El Partido Socialista ha elegido vetar toda candidatura del Nuevo Frente Popular para imponer la suya con el argumento de que sería la única aceptable para Emmanuel Macron», denuncia LFI en un comunicado. Según ellos, la única candidatura que acepta Faure es la suya propia y lamentan que algunos socialistas estén adoptando posturas que, en definitiva, llevarían a renunciar al programa del Nuevo Frente Popular para aliarse con sectores macronistas.

Además, hacen una llamada «a participar masivamente» en las iniciativas lanzadas por los sindicatos el jueves para denunciar las maniobras de Emmanuel Macron con una manifestación ante la Asamblea Nacional.

Poco antes, en una entrevista en France 2, Olivier Faure ha querido calmar los ánimos sobre los desacuerdos en el seno del Nuevo Frente Popular recordando que en los gobiernos extranjeros las negociaciones pueden durar varios meses. También ha señalado que los socialistas no son los únicos que han puesto vetos: «Ha habido otras candidaturas que han sido rechazadas por los Insumisos [...] es normal que cada cual de su opinión en cada momento».

También hubo este lunes otros movimientos en relación con La Francia Insumisa, ya que cinco de sus antiguos responsables, que se presentaron a las elecciones a pesar de haber sido purgados por el partido, van a ser acogidos en el seno del partido ecologista.

En cuanto al grupo macronista, Renacimiento, liderado por Gabriel Attal, han sentado las bases de las negociaciones que están teniendo lugar para repartirse los puestos clave en la Asamblea Nacional, incluida la presidencia. Han acordado que no apoyarán a ningún diputado de la Agrupación Nacional ni de La Francia Insumisa para que puedan acceder a estos cargos.