La última conversación de Daniel Sancho con su padre tras conocer su sentencia: «Tenéis que demostrar que soy inocente de esto»

P. V. LA VOZ

INTERNACIONAL

Daniel Sancho, tras su detención
Daniel Sancho, tras su detención SOMKEAT RUKSAMAN | EFE

El joven considera injusto el veredicto y le pide a su padre seguir luchando por vía judicial: «Estoy tranquilo porque confío en los recursos»

02 sep 2024 . Actualizado a las 18:08 h.

«Papá, ayúdame». Ese fue el grito desgarrador de Daniel Sancho a su padre, Rodolfo, tras conocer su sentencia el pasado jueves. Todo el optimismo de lograr un veredicto más favorable se esfumó en un momento, cuando supo que la justicia tailandesa lo condenaba a cadena perpetua por el asesinato con premeditación y posterior descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Según fuentes cercanas, el joven se abrazó a su padre y le pidió con dolor seguir luchando.

No fue, sin embargo, la última conversación entre padre e hijo. Al día siguiente de conocer la sentencia Rodolfo Sancho y su equipo legal todavía tuvieron una oportunidad de volver a encontrarse con el condenado antes de abandonar la prisión de Koh Samui para su traslado a la cárcel de Surat Thani. Fue menos de 24 horas después de conocer la sentencia, en la mañana del viernes, según narró el periodista Álvaro López en Vamos a ver, que desveló el contenido de la conversación al completo entre los Sancho.

Al día siguiente, el chef había superado en parte su abatimiento inicial y volvía a mostrarse más esperanzado y fuerte. «Estoy tranquilo porque confío en los recursos, confío en que salgan adelante», le manifestó con determinación a su padre, confiando en que, tarde o temprano, las pruebas le permitirán rebajar su pena. «Lo hemos demostrado en el juicio, lo hemos demostrado con pruebas. Tiene que ser esa línea la que tenemos que continuar, porque no hay otra», reclamó. Y mostró la determinación de seguir luchando judicialmente «hasta el final».

Aún así, el joven se declaraba disgustado y en desacuerdo con la sentencia, que calificó de difícil —«Mucho», recalcó— y de injusta y mostró su desconcierto por dicha resolución. «No entiendo una cadena perpetua», declaró antes de volver a justificarse, «porque yo únicamente me defendí». «Es muy injusto todo, todo ha sido un accidente», explicó. 

El chef aprovechó esa última conversación para tranquilizar a su padre ante el golpe que supone para la familia su condena y su traslado a una prisión en la que las condiciones serán mucho más duras. «Me voy a adaptar bien esté donde esté», le dijo a su padre, «pero, por favor, no dejéis de trabajar para demostrar que soy inocente de esto».

Cuarentena antes de su nueva vida

Daniel Sancho ya se encuentra en su nueva prisión, la cárcel de Surat Thani, en la Tailandia continental, aunque debe cumplir allí un período de cuarentena de seis días conforme al protocolo de covid-19. Por ello, no podrá recibir visitas al menos hasta el viernes, 6 de septiembre.

Sancho se encuentra en una celda con otros presos que están en cuarentena y si antes del jueves alguno de ellos diera positivo, todos tendrían que permanecer aislados de nuevo hasta que cada uno de ellos dé negativo.

Situada en una zona aislada, a unos 15 kilómetros al este de la ciudad, y rodeada de campos de cultivo, tiene unas instalaciones relativamente nuevas. Y, aunque es menos peligrosa que la temida prisión de Bang Kwang, donde se creía que iba a ir, es significativamente peor que la de Koh Samui, donde estaba hasta ahora.

Alberga a cerca de 5.400 personas (4.730 hombres y 626 mujeres), el doble de la capacidad que puede soportar, por lo que el hacinamiento es extremo.