Estados Unidos envía su primera delegación a Siria tras más de diez años sin relaciones

Andrés Rey REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Una multitud de sirios en Damasco, este viernes durante una celebración por la caída del régimen.
Una multitud de sirios en Damasco, este viernes durante una celebración por la caída del régimen. Amr Alfiky | REUTERS

Mantuvo una reunión «buena y útil» con el hombre fuerte del nuevo Gobierno

21 dic 2024 . Actualizado a las 09:56 h.

Los tres diplomáticos de Washington que aterrizaron este viernes en Damasco son los primeros enviados estadounidenses a Siria en más de diez años. Sus objetivos eran reunirse con los líderes de las milicias que ahora controlan el país, buscar señales del periodista Austin Tice y de otros norteamericanos desaparecidos, aprender sobre el panorama político del país y ayudar a darle forma.

En efecto, después de que el dictador Al Asad ordenase atrocidades masivas contra los manifestantes de la Primavera Árabe, en el 2011, Estados Unidos rompió relaciones diplomáticas con Siria. La visita representa un paso hacia el intervencionismo diplomático, algo inaudito en los últimos años, en los que el diálogo de Washington con la nación fue más bien a base de acciones militares.

Después de cierta confusión —la delegación canceló su rueda de prensa por «motivos de seguridad»—, el periódico sirio Al Watan informó sobre una reunión con Ahmed al Sharaa, antes Mohamed al Jolani, el líder de la milicia Hayat Tahrir al Sham (HTS) que controla la nueva Administración. Fue «buena y útil», publicó el diario, citando a un cargo norteamericano.

La Embajada estadounidense en Siria optó por la discreción. Compartió en X que la encargada de Oriente Medio, Barbara Leaf, se había reunido con «responsables de HTS para apoyar un proceso político inclusivo, que dé lugar a un gobierno respetuoso con los derechos de todos los sirios».

También abordaron, apuntó la Embajada, la situación en la región, la intención de Siria de ser un buen vecino y la importancia de los esfuerzos comunes contra el terrorismo. La Administración Biden sigue muy preocupada ante la posibilidad de que el Estado Islámico (EI), un grupo terrorista con el que HTS tiene ciertos vínculos, vuelva a hacerse fuerte en el país. Y así es que el Mando Central del Ejército (Centcom) mantiene sus operaciones selectivas, como la que el jueves acabó con Abu Yusif, un alto cargo del EI, en Deir al Zur.

En los próximos días, los enviados «se comunicarán directamente con el pueblo sirio, incluidos miembros de la sociedad civil, activistas y otras voces sirias. Quieren conocer su visión para el futuro del país y cómo Estados Unidos puede ayudarlos». Además de Barbara Leaf, están en Siria Roger D. Carstens, enviado presidencial para asuntos de rehenes, y Daniel Rubinstein, el nuevo asesor especial para Siria.

La llegada de la ONU

Este viernes no solo fue la primera vez para los estadounidenses. También lo fue para la Comisión de Investigación de la ONU para Siria, que desde su creación, en el 2011, nunca había pisado el país. La delegación de las Naciones Unidas «comprobó con consternación que se han dañado, robado o destruido muchas evidencias que podrían ayudar a encontrar el paradero de desaparecidos y servir como prueba en futuros procesos de rendición de cuentas».

Al mismo tiempo, las milicias kurdas de autodefensa, las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), dependientes de la administración kurda que gobierna de facto el norte del país, rechazaron disolverse. Desoyen así las exigencias de Turquía, que sigue asfixiándolos con constantes ataques, y el llamamiento del Gobierno provisional a que todas las milicias se integren en un nuevo Ejército unificado. Las FSD seguirán unidas para evitar el «genocidio» del pueblo kurdo, aseguraron.

Avanzan las negociaciones para un acuerdo en Gaza, pero aún hay dificultades

Las negociaciones entre Israel y Hamás para una tregua en la Franja de Gaza siguen enfrentándose a «dificultades» pese a las «concesiones» que presentaron ambas partes. De acuerdo con una fuente palestina consultada por Efe, existen aún «grandes brechas en temas centrales que entorpecen el acuerdo». De hecho, el jefe de la CIA, William Burns, abandonó anoche Doha, donde estaban teniendo lugar las conversaciones, por «la complejidad y dificultad de las actuales negociaciones». Aun así, la fuente subrayó que ha habido un gran avance.

«El 90 % de las cláusulas del pacto se están preparando. Se han resuelto las discrepancias relacionadas con los cautivos que se van a liberar», explicó, y agregó que de este asunto solo quedan «simples observaciones», sin dar más detalles. Por otra parte, un responsable de seguridad egipcio y conocedor de las negociaciones dijo que Israel pretende tener «un listado con los nombres de todos los cautivos vivos y muertos», y eso es lo que está «prolongando las negociaciones».

El día después

Estas peticiones se producen en un momento en el que Egipto (mediador junto a Catar y Estados Unidos) presiona al presidente palestino, Mahmud Abás, para que ratifique la formación del Comité de Apoyo Comunitario y permita así iniciar debates sobre «el día después» en Gaza.