Albares elude calificar a Maduro de dictador y se aferra a una solución dialogada y pacífica en Venezuela
INTERNACIONAL
Cree que el chavismo y la oposición pueden volver a sentarse a dialogar como han hecho en el pasado
13 ene 2025 . Actualizado a las 12:24 h.El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha eludido tildar a Nicolás Maduro de dictador pese a que el Gobierno no reconoce su reelección como presidente de Venezuela al tiempo que ha apostado una vez más por una solución dialogada entre venezolanos para la crisis que atraviesa el país.
En una entrevista en La 1, recogida por Europa Press, el ministro ha reivindicado que la posición de España ha sido «muy clara» desde las elecciones del 28 de julio en Venezuela, primero exigiendo las actas electorales y luego, al no presentarse, no dando legitimidad al «supuesto resultado».
Por ello, no hubo representación española y de ningún otro país de la UE y los Veintisiete ampliaron las sanciones contra Venezuela el viernes tras tomar posesión Maduro de un nuevo mandato de seis años, ha añadido.
Ahora, lo que España quiere, ha incidido, es «una solución dialogada, política, que haga avanzar la democracia en Venezuela y la voluntad de los venezolanos, que sea genuinamente venezolana y por supuesto pacífica».
Preguntado sobre si comparte con el presidente chileno, Gabriel Boric, y también con la ministra de Sanidad, Mónica García, que Maduro es un dictador, Albares se ha limitado a responder que el Gobierno lo que quiere «es unir a los venezolanos» y ayudarles en esa solución dialogada y «no importar la división» como pretende el PP.
Así las cosas, ha ratificado que mantiene contactos tanto con el régimen de Maduro como con la posición, asegurando que Edmundo González, a quien el Gobierno no ha querido reconocer como presidente electo como sí han hecho Italia o Estados Unidos, goza de libertad para entrar y salir de España, donde se le ha concedido asilo.
En una posterior entrevista en Telecinco, recogida por Europa Press, Albares se ha expresado en términos similares, defendiendo el «liderazgo» de España en todo lo que tiene que ver con Venezuela en el seno de la UE y apostando por ayudar a «unir» a los venezolanos, pero sin calificar en ningún momento a Maduro de dictador.
«Hemos conseguido en otras ocasiones que oposición y gobierno se sentaran a negociar y yo estoy seguro que lo podemos conseguir también» ahora, ha sostenido el jefe de la diplomacia.
Por otra parte, ha reivindicado que «no hay ningún gobierno del mundo que haya hecho tanto por Venezuela como España» y ha dejado claro que un elemento fundamental de la postura respecto a Venezuela es el «respeto a la integridad física y libertad de expresión y manifestación de líderes opositores», de ahí que el Gobierno fuera uno de los primeros en condenar el arresto el jueves pasado de la líder opositora María Corina Machado.
CRÍTICAS AL PP
En este sentido, ha instado al PP a que sume a la postura del Gobierno y ha rechazado las acusaciones de su líder, Alberto Núñez Feijóo, de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comporta como Maduro por la última ley propuesta para limitar la acusación popular.
«Es absurdo», ha aseverado, defendiendo que el Gobierno hace todo «democráticamente» y las leyes se llevan al Parlamento y se votan. «Lo que hay en estos momentos hacia la familia del presidente es un auténtico acoso», ha denunciado, subrayando que «el único problema» de la mujer y el hermano de Sánchez, es «precisamente ser familia del presidente del Gobierno». «Esa es la única tacha que tienen», ha abundado