El fiscal tenía pruebas para condenar a Trump por injerencia electoral en el 2020

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Donald Trump y el fiscal especial Jack Smith.
Donald Trump y el fiscal especial Jack Smith. TASOS KATOPODIS / KEVIN WURM | REUTERS

El neoyorquino ha reaccionado al informe tachando a Smith de «descerebrado»

14 ene 2025 . Actualizado a las 23:16 h.

Jack Smith, fiscal especial a cargo de la acusación federal contra Donald Trump tras el asalto al Capitolio del 2021, hizo público este martes el informe de su investigación sobre el caso. Según Smith, si Trump no hubiese ganado las elecciones, la evidencia disponible habría sido suficiente como para motivar su condena.

Son 137 páginas redactadas a lo largo de dos años que recogen, según el criterio del fiscal especial, evidencias «suficientes como para obtener y defender una condena» contra el neoyorquino en un hipotético juicio. Una afirmación demoledora con la que concluye que Trump es culpable de tratar de adulterar los resultados electorales a base de presionar a funcionarios estatales, presentar electores falsos, utilizar al Departamento de Justicia e intentar convencer a su vicepresidente, Mike Pence, de no cumplir con sus obligaciones constitucionales.

Además, el informe concluye que el neoyorquino también es responsable de haber propiciado el asalto al Capitolio por parte de sus seguidores en enero de 2021. Según Smith, el entonces presidente saliente —ahora reelecto— incitó a sus seguidores a ejercer «la violencia contra aquellos que percibía como sus oponentes». Una serie de acciones que alcanzaron su cénit cuando una turba entró en el edificio gubernamental para tratar de impedir la certificación de los resultados electorales.

La publicación del informe concluye una pelea que se ha prolongado durante más de una semana entre los abogados de Trump y la fiscalía. Smith, que abandonó el caso en noviembre tras la victoria electoral del republicano, ha puesto su empeño en que el texto viese la luz, consciente de que cualquier proceso judicial contra un presidente en ejercicio sería inviable.

El propio documento lo reconoce: la prohibición de enjuiciamiento de un presidente es «categórica» e inmutable, sin importar «la gravedad de los hechos, la fuerza de las pruebas y los méritos de la fiscalía». Como máximo mandatario electo de EE.UU., Trump, por tanto, no afrontará consecuencias legales por tratar de mantenerse ilegalmente en la Casa Blanca.

Trump, que enfrentaba cargos de conspiración para defraudar a los EE.UU., respondió a la publicación del informe de Smith a través de Truth Social tachando al fiscal especial de «descerebrado» e «incapaz de llevar el caso a juicio antes de las elecciones». Una afirmación en la que el presidente electo no menciona que la estrategia de su defensa pasó, en todo momento, por litigar cada cuestión para tratar de retrasar el juicio, precisamente, hasta después de los comicios.

Las investigaciones de Smith sobre Trump incluyen un segundo volumen dedicado a los documentos clasificados encontrados en Mar-a-Lago y que Trump habría conservado irregularmente. Su publicación está pendiente de una vista que se celebrará el viernes. La jueza Aileen M. Cannon será quien tenga la última palabra sobre el asunto.