Grupos de manifestantes atacaron varias embajadas en Kinsasa
28 ene 2025 . Actualizado a las 21:37 h.Los enfrentamientos entre el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) —apoyado por el Gobierno de Ruanda, según ha constatado la ONU— y el Ejército de la República Democrática del Congo (RDC) están causando muertos, escasez de comida y miles de desplazados en la ciudad de Goma, en el este del país, que los rebeldes aseguraron haber tomado el lunes tras seis días de ofensiva.
Aunque no hay cifras oficiales de muertos, las Fuerzas Armadas de Sudáfrica informaron este martes de que cuatro de sus soldados fallecieron el lunes en el fuego cruzado del M23 y el Ejército congoleño, mientras que otros dos militares uruguayos resultaron heridos este martes, según recoge Efe. Estos soldados son integrantes de misiones de paz en la RDC.
El portavoz de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU, Jens Laerke, dijo que los enfrentamientos son muy intensos y que hay muchos cadáveres en las calles de Goma, y agregó que se han recibido reportes de violencia sexual perpetrada por los combatientes, así como saqueos a la propiedad privada, hospitales y almacenes con reservas humanitarias.
Según los testimonios de los equipos médicos, los hospitales están recibiendo una marea de heridos y tienen dificultades para afrontar esta situación con los medios que tienen. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) informó de tiroteos y uso de artillería pesada en zonas densamente pobladas, así como contra campamentos de desplazados.
También el CICR manifestó este martes su preocupación en torno a un laboratorio en Goma que alberga diversos patógenos, incluidas muestras del ébola, una enfermedad que reaparece cada cierto tiempo en la RDC.
Violencia y manifestaciones
En Kinsasa, grupos de manifestantes protestaron contra el Gobierno de Ruanda y atacaron la embajada de este país, al que acusan de apoyar a los rebeldes del M23, y otras legaciones diplomáticas como las de Estados Unidos, Francia, Bélgica y Uganda.
Ante las embajadas, los manifestantes denunciaron el silencio y la inacción de sus gobiernos frente a la escalada del conflicto y pidieron una mayor implicación de la comunidad internacional en el proceso de paz.