México extradita a Estados Unidos a 29 narcotraficantes de alto perfil en medio de negociación por los aranceles
INTERNACIONAL

La mayoría de los extraditados, entre los que se encuentra el fundador del cartel de Guadalajara, se enfrentan a penas de cadena perpetua
28 feb 2025 . Actualizado a las 08:19 h.El Gobierno de México ha extraditado este jueves a Estados Unidos a cerca de una treintena de detenidos vinculados con el narcotráfico, incluido el confundador del cartel de Guadalajara Rafael Caro Quintero, pocos días antes de que la Administración de Donald Trump aplique los aranceles estadounidenses a los productos mexicanos.
«Esta mañana fueron trasladadas a EE.UU. 29 personas que se encontraban privadas de su libertad en diferentes centros penitenciarios del país, las cuales eran requeridas por sus vínculos con organizaciones criminales por tráfico de drogas, entre otros delitos», reza un breve comunicado conjunto de la Fiscalía de México y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Las autoridades mexicanas han remarcado que «la custodia, traslado y entrega formal de dichas personas se realiza bajo los protocolos institucionales con el debido respeto de sus derechos fundamentales, en apego a la Constitución y la ley de seguridad nacional, y bajo la solicitud del Departamento de Justicia de Estados Unidos».
«Esta acción se enmarca dentro de las labores de coordinación, cooperación y reciprocidad bilateral, en el marco del respeto a la soberanía de ambas naciones», han agregado los mencionados organismos mexicanos, que, por su parte, no han proporcionado las identidades de los ciudadanos extraditados.
Washington, decidida a «destruir a los carteles»
Por su parte, Washington sí ha proporcionado el listado de las personas extraditadas, que se enfrentan cargos relacionados con crimen organizado, tráfico de drogas, asesinato, uso ilegal de armas de fuego, lavado de dinero y otros delitos. Los extraditados «han sido responsables colectivamente de la importación a EE.UU. de cantidades masivas de drogas, incluida cocaína, metanfetamina, fentanilo y heroína, así como de actos de violencia asociados».
La inédita extradición incluye a al cofundador del cartel de Guadalajara Rafael Caro Quintero, que fue en su día uno de los narcos más buscados por DEA, acusado de ser responsable del asesinato de un agente de la Administración de Control de Drogas en 1985. También han sido extraditados Martin Sotelo, acusado de matar en 2022 a un ayudante de sheriff; Vicente Carrillo Fuentes, que lideró el Cartel de Juárez durante casi dos décadas, el hermano del líder del cartel Jalisco Nueva Generación, Antonio Oseguera Cervantes; y los líderes de «los Zetas» Ramiro Pérez Moreno y Lucio Hernández Lechuga. También está bajo custodia estadounidense José de Jesús Méndez Vargas, que fue líder de La Familia Michoacana. La mayoría de los extraditados enfrentan penas de cadena perpetua en tribunales de Nueva York, el Distrito de Columbia, Texas, Arizona, Chicago o Carolina del Norte.
La fiscala general estadounidense, Pam Bondi, ha recordado que Trump declaró como grupos terroristas a los cárteles, razón por la que su oficina «está decidida a destruir los cárteles y las bandas transnacionales». «Enjuiciaremos a estos criminales con todo el peso de la ley en honor a los valientes agentes que dedicaron sus carreras -y en algunos casos sus vidas- para proteger a personas inocentes del flagelo de los violentos cárteles», ha aseverado.
Según la oficina de Bondi, «muchos de los acusados fueron objeto de solicitudes de extradición de larga data por parte de Estados Unidos que no fueron atendidas durante la Administración anterior», pero ha destacado que «el Gobierno mexicano ha decidido transferirlos al actual Gobierno estadounidense en respuesta a los esfuerzos del Departamento de Justicia» de cara a la «eliminación total de estos carteles».
La semana pasada, el Gobierno de Donald Trump declaró a 6 cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, una medida de presión contra México.
La extradición, de hecho, ocurrió coincidiendo con una visita de altos funcionarios mexicanos a Washington, que negocian con el Gobierno de Trump frenar la imposición de aranceles a productos de México que EE.UU. planea implementar a partir del 4 de marzo.