México extradita a EE.UU. al capo de capos Caro Quintero y 28 narcos más
INTERNACIONAL
La entrega se produce tras las presiones de Washington sobre el Gobierno de Sheinbaum
01 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Cuarenta años después, EE.UU. logró uno de sus mayores objetivos en su guerra contra las drogas: México aprobó el jueves entre presiones de la Administración Trump la extradición de 29 de los mayores capos históricos del narcotráfico que se encontraban en prisión, y entre ellos se encontraba Rafael Caro Quintero, fundador del antiguo cartel de Guadalajara, que llegó a ser conocido como «capo de capos» y era requerido por las autoridades estadounidenses desde 1985 por el asesinato del agente encubierto de la agencia antidrogas de EE.UU. (DEA) Enrique Kiki Camarena.
«Este momento es extremadamente personal para los hombres y mujeres de la DEA que creen que Caro Quintero es responsable de la brutal tortura y asesinato del agente especial de la DEA Enrique Kiki Camarena», dijo el administrador en funciones de la DEA, Derek S. Martz. El capo fue presentado ayer ante un tribunal de Nueva York con las esposas del agente Camarena puestas, donadas por su hijo, que es juez en EE.UU. «Enviamos un mensaje a todos los líderes de los carteles, a todos los traficantes, a todos los criminales que envenenan nuestras comunidades: Tendréis que rendir cuentas. No importa cuánto tarden, no importa lo lejos que huyan, la Justicia los encontrará», añadió Mertz.
El asesinato se produjo después de que las autoridades quemaran más de mil hectáreas de marihuana en una finca de Caro Quintero gracias a informaciones de Camarena. El capo fue detenido meses después y pasó 28 años en una prisión mexicana hasta que un juez suspendió su juicio en el 2013 y quedó libre, volviendo al narcotráfico y siendo de nuevo capturado en el 2022.
Entre los extraditados están también Vicente Carrillo Fuentes, exlíder del cartel de Juárez, hermano del «señor de los cielos» Amado Carillo, y los hermanos Treviño Morales, alias Z-40 y Z-42, exlíderes de los Zetas.
«Es una rama de olivo de Sheinbaum», dijo el exjefe de la DEA Mark Vigil a Arístegui Noticias, refiriéndose a la presidenta mexicana, cuando conoció las deportaciones, que se producen en un momento de máxima presión de EE.UU. a México. Washington reclama mayores esfuerzos en la lucha contra la migración y las drogas y el movimiento de las autoridades del país latinoamericano podrían ser un gesto de buena voluntad a la Administración Trump. «Les puedo decir una cosa: la corrupción del poder judicial en nuestro país es aberrante», dijo la presidenta mexicana, dejando en su secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, las explicaciones sobre el operativo llevado a cabo.
El funcionario reveló, horas más tarde, que tenían informaciones de que algunos de los extraditados iban a ser liberados gracias a sus vínculos con los jueces.
“Sheinbaum quiso lanzar una señal inequívoca del cambio de política del combate al narcotráfico, respecto a su predecesor Andrés Manuel López Obrador”, dijo al diario El Informador el analista Jaime Barrera. El contexto internacional está provocando posicionamientos en la política mexicana.