Nuevas fisuras en la capa de ozono

Susana Pérez

LA VOZ DE LA ESCUELA

NASA

Las últimas observaciones y mediciones realizadas desde el espacio revelan que el grosor de este gas en la atmósfera se ha reducido sobre las zonas del planeta más pobladas

28 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Durante las tres últimas décadas la atención sobre el debilitamiento de la capa de ozono ha estado centrada en el importante agujero detectado en 1985 sobre la Antártida. Las medidas adoptadas en el Protocolo de Montreal de 1987 han conseguido revertir la tendencia, de manera que actualmente los niveles de ozono antártico se han recuperado significativamente. Sin embargo, estudios recientes sobre la cantidad de ozono total en la atmósfera han revelado que ha disminuido en las capas más cercanas a la superficie terrestre y en latitudes medias, precisamente sobre las regiones más pobladas del planeta.

El ozono es un gas presente de forma natural en la atmósfera. Alrededor del 90 por ciento se encuentra a una altitud de entre 16 y 50 kilómetros, en la denominada estratosfera, donde cumple una importante función de filtro de los rayos ultravioleta procedentes del sol. El 10 por ciento restante se halla en la parte más baja de la atmósfera, la troposfera, a una altura de entre 10 y 16 kilómetros. Este escudo protector de ozono impide que la radiación ultravioleta llegue de forma masiva a la superficie del planeta, lo que sería muy nocivo para los seres vivos.

HIPÓTESIS

Diversos estudios publicados en revistas científicas han revelado que la capa de ozono de las latitudes medias, en la zona entre la troposfera y el límite inferior de la estratosfera, sufre una pérdida de espesor. Si bien esta disminución es menor que la detectada sobre los polos hace treinta años, lo cierto es que en las latitudes medias la incidencia de la radiación ultravioleta es más intensa, y supone un riesgo para los ecosistemas y la población que vive ahí.

El descubrimiento de estas nuevas fisuras en la capa de ozono ha sorprendido a los científicos, que deben ahora averiguar las causas, pero apuntan ya algunas hipótesis. Por un lado, señalan las llamadas sustancias de vida muy corta, compuestos químicos que se usan en productos industriales, como disolventes y decapantes, y que tienen la capacidad de destruir el ozono. Pero también se piensa que el cambio climático puede tener su influencia, mediante la alteración de las corrientes de aire atmosféricas que podrían estar barriendo el ozono desde las latitudes medias hacia otras regiones.

Protocolo de Montreal

El tratado internacional para la protección de la capa de ozono nació a raíz del descubrimiento, en 1985, de un importante agujero sobre la Antártida. Los científicos alertaron sobre la necesidad de detener la emisión de los agentes responsables de esta pérdida de ozono, especialmente los clorofluorocarbonos (CFC), compuestos empleados en aparatos de refrigeración, aire acondicionado y aerosoles de uso cotidiano.

Dos años después se firmó el Protocolo de Montreal, que contempla medidas para controlar la producción y consumo mundial de las sustancias que destruyen el ozono. El protocolo fue ratificado en el 2009 por los 196 países miembros de la Organización de Naciones Unidas, y así se convirtió en el primer tratado internacional con ratificación universal. La aplicación de las medidas adoptadas está resultando muy efectiva, pues permite recuperar las concentraciones del ozono estratosférico sobre la Antártida y reducir el agujero.

Cambios estacionales

La mayor parte del ozono de la estratosfera se origina en los trópicos, en una secuencia de reacciones químicas en las que interviene la luz solar. Sin embargo no es en estas regiones donde se acumula la mayor cantidad, ya que las grandes corrientes de aire atmosférico desplazan el ozono hacia las latitudes medias y altas, donde la media anual es más elevada.

El espesor de la capa de ozono además varía con las estaciones y así, por ejemplo, en el hemisferio norte, la región polar registra el mayor grosor en invierno y principio de primavera. Por el contrario, en el hemisferio sur, durante la primavera austral la confluencia de unas singulares condiciones químicas y meteorológicas sobre la Antártida ?como la formación de las llamadas nubes estratosféricas polares que favorecen la destrucción del ozono? provocan que el agujero alcance su mayor extensión anual.

En esta animación se muestra la evolución de las nubes estratosféricas polares y del agujero de la capa de ozono sobre la Antártida a lo largo del año.

  • https://vimeo.com/106151359

actividades

  • Vigilantes del ozono. La sección NASA Ozone Watch de la agencia espacial norteamericana muestra imágenes de la capa de ozono sobre los polos creadas a partir de los datos obtenidos a diario por los satélites. En esta dirección se puede ver la evolución de los últimos días, así como la de meses anteriores. Las zonas coloreadas con azules y morados indican dónde es más fina la capa. Las amarillas y rojas, dónde es más gruesa:
    • https://ozonewatch.gsfc.nasa.gov/NH.html
  • Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono. Organizado por las Naciones Unidas, se celebra el 16 de septiembre, día del año 1987 en que se firmó el Protocolo de Montreal. En esta web hay un sencillo test para poner a prueba los conocimientos sobre el tema, además de otros materiales y recursos:
    • http://www.un.org/es/events/ozoneday/index.shtml