Las obras en la N-120 en Ourense entorpecen el tráfico en dirección a Monforte

ourense / la voz

LEMOS

22 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El cierre al tráfico de catorce kilómetros de la N-120, la principal vía de comunicación entre la capital ourensana y la comarca oriental de la provincia, provocó ayer un importante caos de tráfico al obligar a todos los conductores a desviarse por la C-546, una estrecha y antigua carretera por la que apenas sí pueden cruzarse en muchos de sus tramos dos vehículos.

El corte del vial había sido anunciado por el Ministerio de Fomento y se efectuó para que los operarios pudiesen realizar trabajos de establización de taludes y protección de la calzada, en un tramo especialmente afectado por desprendimientos en los últimos meses.

Sin embargo, fueron muchos los conductores que, a primera hora de la mañana, se toparon con los desvíos, que desde la capital ourensana comenzaban en A Lonia. Las señales obligaban desde ahí a los conductores a desviarse por la antigua carretera. Aunque las autoridades recomendaban que, dadas las carecterísticas de la vía, que los autobuses y camiones con destino a Monforte se desviasen por Chantada, un rodeo aún más largo y complicado, la carretera no tardó en colapsarse.

Sin embargo, y pese al trastorno que causan estos trabajos, los conductores que transitan por la provincia se verán obligados a soportar las obras de conservación que en breve se llevarán a cabo en la A-52, la A-75, la N-532 y la N-525.